Cubano Rei Sanchez corona el pico Lobuche en los Himalayas

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El cubano Rei Sánchez consiguió un nuevo hito para la isla en el montañismo: el pasado domingo coronó el pico Lobuche, para convertirse en el segundo cubano en conquistar esa cima, no lejos del Everest. Recién la semana pasada lo consiguió, por segunda vez, el habanero Yandy Núñez Martínez.

“Hace dos días cumplí mi objetivo de coronar el monte Lobuche. Gracias a The Cuban Mountaineer (Yandy) y a Pasang Tenzing Sherpa por la guía. No podría haberlo conseguido sin ustedes. Mi primer ‘seis mil’, y ciertamente, no el último”, escribió Rei en su muro de Facebook, donde ha ido dejando constancia de su travesía.

Aunque todos los focos están en Yandy, que aspira a coronar el Everest, el también cubano Rei logró toda una proeza en los Himalayas. Su perfil indica que estudió en la CUJAE y que reside en Miami, pero con un perfil bajo ha llegado muy alto.

En posts anteriores compartió escenas del Campamento Base del Everest, así como imágenes del valle de Khumbu y su famosa cascada de hielo, donde suelen realizarse los entrenamientos previos a las famosas “rotaciones” para aclimatar el cuerpo y enfilar hacia el techo del mundo.

Sus historias en redes sociales muestran las bellezas del Parque Nacional de Samargatha, en Nepal, con su rica tradición budista, sus picos imponentes, puentes sobre profundas barrancas y gente sonriente, los sherpa, quienes conocen las alturas como la palma de sus manos.

Fue particularmente emotivo verlo en Phakding junto a Yandy, a punto de iniciar una aventura con la que muchos cubanos apenas pueden soñar, por lo costoso y desafiante, y aunque ninguno de ellos resida actualmente en la isla que los vio nacer, saben que representan a los cubanos.

El Lobuche (también deletreado Lobuje) es una montaña nepalí cercana al glaciar Khumbu y el asentamiento de Lobuche. Hay dos picos principales, el Lobuche Este y el Oeste, siendo el primero el más concurrido, pues puede alcanzarse su cima de 6.119 metros sobre el nivel del mar con técnicas de senderismo.

Entre ambos picos hay una cresta larga y con muescas profundas, con una caída pronunciada que hace imposible conectarlos por via terrestre.

A su vez, Yandy ya se alista para iniciar las rotaciones, una serie de ejercicios de ascenso a bases enclavadas a mayor altitud, con posteriores descensos para la recuperación. El propósito es que el organismo vaya adaptándose a los rigores de la altura, en particular el poco oxígeno y la baja presión atmosférica.

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