El turismo en Cuba enfrenta una de sus peores crisis en años, mientras en Grecia se impulsa una campaña para destacar las bondades de la isla bajo el eslogan «Cuba Única». La contradicción refleja el contraste entre la realidad económica del país caribeño y los esfuerzos diplomáticos por atraer visitantes.
Según el Financial Times, el número de visitantes a Cuba ha caído drásticamente, pasando de 4.7 millones en 2017 a 2.4 millones en 2023. Problemas estructurales como apagones frecuentes y escasez de insumos básicos han alejado a los turistas, quienes ahora deben llevar linternas recargables y ventiladores portátiles para lidiar con la falta de electricidad. La industria, que alguna vez fue un pilar de divisas para el país, aporta ahora apenas 1.3 mil millones de dólares anuales, lejos de los ingresos generados por la exportación de servicios médicos.
Mientras tanto, en Grecia, la campaña «Cuba Única» debutó en la feria de turismo Philoxenia 2024, con Yanet Mora Ferguson, consejera de turismo de la embajada cubana, a la cabeza. Según Travel Daily News, esta iniciativa busca resaltar la autenticidad de Cuba, promoviendo su cultura vibrante, paisajes diversos y hospitalidad. Mora Ferguson subrayó en una entrevista la afinidad cultural entre griegos y cubanos, mencionando la pasión compartida por la danza y la gastronomía. Además, destacó destinos clave como La Habana, el Valle de Viñales y Varadero, descritos como imperdibles para los turistas griegos.
Sin embargo, los desafíos internos de Cuba siguen siendo evidentes. El Financial Times detalla que muchos hoteles carecen de servicios básicos, desde agua corriente hasta ingredientes esenciales para preparar cócteles icónicos como el mojito. Además, la fuga de talentos y las sanciones económicas dificultan la operación de operadores turísticos, quienes deben sortear obstáculos legales y financieros para continuar ofreciendo viajes a la isla.
A pesar de este panorama sombrío, la campaña «Cuba Única» intenta proyectar una imagen positiva en mercados internacionales como Grecia, donde el interés por la isla parece crecer. Con herramientas como el e-Visa y el apoyo a agencias de viajes, se busca facilitar el acceso al país. No obstante, la pregunta persiste: ¿serán suficientes estos esfuerzos para revertir el declive turístico de Cuba?
La dualidad entre el deterioro interno y la promoción externa resalta la complejidad de una nación que, a pesar de sus problemas, sigue apostando por su atractivo único en el escenario mundial.
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