Uno de las embarcaciones apareció en Miami Beach; la otra, en Surfside
Si bien es cierto que la playa de Miami Beach es extensa, no son muchos los avistamientos de botes con migrantes cubanos, provenientes de la isla. Se han visto, sí, pero de manera escasa.
Algunos, los menos y más «raros», han aparecido por Hollywood, Davie y hasta en Júpiter y Boca Ratón, pero los datos últimos referentes a la llegada de los balseros cubanos en botes desde la isla, parece indicar que sus tripulantes marcan los puntos de llegada en los cayos, más cercanos, aunque inhóspitos a veces.
Por eso resultó extraño para muchos residentes en la zona de la Collins Ave. y la Avenida 69, donde existen varios edificios residenciales de apartamentos – y un Publix – «amanecer» el domingo con la noticia de que, justo frente a ellos, en la playa, apareció un bote de madera, de los que usan los pescadores cubanos, en la orilla.
Según NBC6, desde Miami, el barco presentaba marcas que indicaban que tenía su base en La Habana, Cuba.
Un funcionario en el lugar le dijo a NBC 6 que el bote aterrizó durante la noche en Miami Beach y que no había señales de migrantes o agentes de la patrulla fronteriza allí el domingo por la mañana. No se sabe si quienquiera que estuviera a bordo llegó a tierra con éxito.
Si bien la noticia fue todo un suceso, algunos residentes cercanos al lugar, como el historiador del Arte y periodista Jorge de Armas, ni se enteraron de la llegada del bote a Miami Beach, a pesar de que ocurrió a apenas unos metros de su casa.
Al respecto, Jorge expresa:
«La emigración se ha convertido en la única vía para la libertad de los cubanos.»
Y añade:
«Arriesgarse a cruzar el estrecho, donde miles de vidas quedaron, o la selva, con un similar saldo de muerte, ha devenido en una forma de oposición silenciosa al totalitarismo. También evidencia la derrota del sistema, la imposibilidad de los dueños de la Isla de sacarla a flote.»
Llega a Surfside una balsa quemada con uniforme de policía cubano dentro
Sin embargo, este no es la embarcación que es «noticia» en estos momentos, pues no muy lejos de allí, de Collins y la 69 Calle, pero en Surfside, apareció otro bote; también el domingo en la mañana.
Según publica el portal digital CiberCuba, una balsa llegó también ese día, pero a Surfide, y las huellas de un incendio a bordo son ahora la preocupación de muchos. ¿Qué pasó con los cubanos que viajaban en ella? Uno de ellos, al parecer, era un policía cubano, de la división de tránsito.
Así indicaron algunos de los internautas que comentaron la aparición de la balsa y de un uniforme de un policía cubano en su interior, en la publicación de Facebook hecha por el periodista y cineasta cubano Manuel Zayas, testigo de la llegada de la balsa a la playa.
Las imágenes muestran que la embarcación sufrió un incendio a bordo.
Zayas dijo a CiberCuba que «la balsa arribó por North Miami Beach, a la altura de la calle 89 y Collins», y que en su interior se podían ver algunos objetos.
«Había zapatos, restos de alimentos, un uniforme de oficial de PNR, un tanque de combustible intacto y restos de ropa y otros objetos quemados», comentó el periodista y cineasta.
El uniforme de policía lleva el número 39762 y agarrado a él un silbato, similar al que usan los policías de tránsito.
La balsa al parecer llegó arrastrada por la corriente del estrecho de la Florida y el hecho de que el uniforme del policía estuviese intacto llama mucho la atención.
Ezequiel Pérez, un cubano residente en Miami cree que quienes iban a bordo fueron interceptados por la Guardia Costera, y que el oficial de la PNR se la quitó, para evitar de algún modo ser repatriado a la isla. Ezequiel cree que la misma Guardia Costera pudo incendiar el bote, con la esperanza de quemar la poliespuma y que el bote, con una armazón de hierro a modo de casco, se hundiera.
Para muchos, como es el caso del periodista de América Tevé Mario J. Pentón, este uniforme y la balsa le recordaron una noticia que él cubrió hace algunos años, cuando otro policía cubano llegó a Miami, sin quitarse el uniforme, pero fue admitido legalmente en los EE.UU.
Tiempo después, el mismo policía asesinó fuera del estado de la Florida a una mujer adulta y su hija y abandonó el auto en el cual viajaban en medio de un bosque, para que no pudieran encontrarlas. Por el crimen fue condenado a cadena perpetua.
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