Una carrera ilegal que forma parte de muchas otras carreras ilegales en el Sur de la Florida
Tres personas fueron arrestadas y acusadas de conducir de manera imprudente y huir de la policía después de una persecución en los condados de Miami-Dade y Broward. Supuestamente, los sospechosos intentaban apoderarse de una intersección y se habían reunido en un centro comercial para ultimar los detalles de una carrera ilegal, cuando fueron descubiertos por la policía.
La policía siguió a los sospechosos, que conducían un Dodge Charger negro con franjas blancas, mientras conducían temerariamente a altas velocidades por los condados, dijo el canal Local 10 News.
Dos de los sospechosos, Chenel Chevalier y Chelsey Gomez, abandonaron el Dodge y huyeron en un automóvil conducido por Timothy Washington. Los tres han sido acusados de conducción imprudente y huida de la policía, y Washington también ha sido acusado de cómplice después del hecho.
Los arrestos se producen como parte del detalle de toma de control de la intersección del Departamento de Policía de Miami-Dade, que toma medidas enérgicas contra las carreras callejeras ilegales.
La policía recibió inteligencia de que los sospechosos planeaban tomar una intersección de Southwest 8th Street, lo que provocó la vigilancia del helicóptero que condujo a su arresto.
El mismo día, la Oficina del Sheriff del condado de Broward anunció el arresto de seis miembros destacados del grupo de toma de control de intersecciones por infracciones de carreras callejeras.
Las carreras ilegales
En Florida, las carreras ilegales son un delito grave que puede resultar en fuertes multas, suspensión de la licencia e incluso tiempo en la cárcel.
Según la ley de Florida, participar en una carrera o concurso de velocidad ilegal en una vía pública se considera un delito menor de segundo grado. Si es declarado culpable, el infractor puede enfrentar hasta 60 días de cárcel, una multa de hasta $500 y una suspensión de seis meses de su licencia de conducir. Además, el tribunal puede incautar el vehículo utilizado en la carrera hasta por 30 días.
Si la carrera ilegal causa daños a la propiedad o lesiones a alguien, el delito se convierte en un delito menor de primer grado. Esto puede resultar en hasta un año de cárcel, una multa de hasta $1,000 y la suspensión de la licencia de conducir del infractor por un año. El tribunal también puede incautar el vehículo hasta por 90 días.
En casos más graves, si la carrera ilegal causa lesiones corporales graves o la muerte, el infractor puede enfrentar cargos por delitos graves. Esto puede resultar en tiempo de cárcel y multas significativas, así como la revocación permanente de su licencia de conducir.
También es importante tener en cuenta que los espectadores de carreras ilegales también pueden enfrentar sanciones. Según la ley de Florida, cualquier persona que a sabiendas participe o sea espectador de una carrera ilegal puede ser acusada de un delito menor de primer grado. Esto puede resultar en hasta un año de cárcel, una multa de hasta $1,000 y la suspensión de su licencia de conducir por un año.
Además de las consecuencias legales, las carreras ilegales también son increíblemente peligrosas y pueden provocar lesiones graves o la muerte. No solo pone en riesgo a los conductores, sino también a los peatones y otros automovilistas. Como tal, las agencias de aplicación de la ley en Florida están tomando medidas enérgicas contra las carreras ilegales y tomando medidas enérgicas para garantizar que las carreteras sean seguras para todos.
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