La frase, por sí sola, lo dice todo… o nada: Ana de Armas habló de un hombre. Dijo que lo intentó todo. Y que no había hecho algo así antes.
Claro, muchos se fueron por el lado sentimental —no los culpamos, el chisme encanta y entretiene, más si tiene morbo — y pensaron desde el titular en que habría hablado de Manuel Anido, el hijastro de Díaz-Canel, con quien a la actriz cubana se le vinculó fugazmente. Pero no, Ana no hablaba de una historia de amor, sino de acción. Literalmente.
En entrevista con En Casa con Telemundo, Ana de Armas se refirió a su trabajo en Ballerina, la esperada cinta del universo John Wick, donde interpreta a una asesina entrenada por la temida Ruska Roma, una mujer con un pasado lleno de traumas y una sed de venganza que la impulsa a buscar respuestas… y a repartir golpes con elegancia.
“Yo era superfan de John Wick, de todas las tres, y de Keanu, por supuesto”, dijo entusiasmada. Esta sería la tercera película que comparte con Reeves, a quien calificó como “un hombre tan generoso y tan amable… siempre es una colaboración con él”.
Y claro, ¡es de este hombre de quién habló! Del actor Keanu Reeves. ¡Mal pensados que son!
Lo intentó todo. Menos prenderse fuego.
Ana también reveló que para esta película “lo intentó todo” en cuanto a las escenas de acción.
“Excepto por unas cosas con fuego y alguna vez que tiraban a mi stunt por ahí, todo lo demás lo hice yo”, dijo.
¡Que ya bastante se quemó en el pasado… al vincularse sentimentalmente con Manuel Anido, el hijastro de Díaz-Canel! Esta vez, el fuego fue solo en el set y con control de riesgos.
Según contó, nunca antes había trabajado con semejante nivel de intensidad física: “Fue un nivel de disciplina y entrega que no había hecho algo así antes”.
La actriz cubana se entregó por completo al papel, convencida de que la película no es solo una extensión del mundo de John Wick, sino una historia sólida por derecho propio. Y eso se nota: no solo se preparó físicamente, también emocionalmente para dar vida a una mujer rota, pero fuerte.
Ballerina ya tiene a muchos sentados con el ticket en mano, y quienes la han visto aseguran que de Armas estuvo – esta vez sí -espectacular.
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