Al parecer el viceprimer ministro cubano Jorge Luis Tapia se llevó los titulares de la segunda jornada parlamentaria con su exhortación a que la gente críe peces en estanques construídos en los barrios para mitigar el desabastecimiento alimentario.
La enérgica inspiración de Tapia desde la tribuna del Palacio de las Convenciones estuvo convoyada lo que para muchos televidentes era un hecho desconocido o al menos ya no recuerdan haber consumido alguna vez ese «pescado casero» : el hombre aseguró que «en los años del período especial hubo un movimiento a nivel de Consejo Popular que muchas familias hicieron el tanque y en el mundo existe eso. Aquí en Cuba se hizo. Un estanque, cuatro metros a la redonda y criaban pescado ahí».
«Pero eso lo podemos hacer. Vamos a llevar esa acuicultura familiar. Tenemos que hacerlo. Vamos a hacer ese programa», afirmó Tapia en medio de la crisis inflacionaria y los abusivos precios de los alimentos que sufre la población cubana.
La propuesta podría destapar iniciativas impredecibles que han producido a través de seis décadas insólitos hechos como el criar puercos en bañaderas.
No se descarta que la sugerencia en la carrera contrarreloj de «producir alimentos en el menor tiempo posible» disparó peocupaciones en el ministerio de salud pública con el agua acumulada de los estanques, criaderos de mosquitos junto a los peces en los barrios y las epidemias de dengue.
Programas de acuicultura se han impulsado en las afueras de la capital y en otras zonas del país, como por ejemplo un proyecto ubicado en el municipio del Cotorro, a 20 km al sur de La Habana, con una cooperativa que se levantó en octubre de 2020 en las áreas previamente ocupadas por la planta de desechos residuales de una antigua cervecería.
Tapia también se refirió a la pérdida de prácticas comunes en las viviendas rurales, como lo fue la cría de cerdos, gallinas, chivos, ovejos, conejos y otras aves, así como la siembra de yuca, plátano, frutas y otros cultivos en los patios.
A fines de junio la viceministra de la Industria Alimentaria , Mydalis Naranjo Blanco, declaró que los mares que rodean a Cuba no tienen los peces suficientes para satisfacer el consumo de los cubanos.
