Alejandro Guerrero, un joven actor cubano que ha ganado popularidad recientemente, especialmente por su papel en la telenovela «Renacer», donde interpreta a Lian, un personaje que ha resonado profundamente entre la audiencia cubana, contó durante una entrevista lo que le sucedió con una seguidora.
Según su anécdota, revelada en un podcast del canal El Timbirichi de los Bumbis, en YouTube, una fanática le ofreció mil dólares para tener una relación con él. El mensaje de la solicitud le llegó a través de Instagram.
Durante la entrevista, el joven actor cubano habló sobre la telenovela “Renacer” y sobre su papel, el cual dijo le ha dado visibilidad. Y fanáticos. Y fanáticas.
Una de ellas es esa chica, de la cual Alejandro Guerrero no dijo su nombre, y solo se limitó a decir que le escribió a través de Instagram y le ofreció mil dólares por tener una relación íntima con él.
No hay dudas de que la anécdota se las trae, pero no será el único, ni mil dólares es una cifra para asombrarse. En lo personal he sido testigo de ofertas mucho más caras, que han sido rechazadas y las que, por respeto a la privacidad de los involucrados, no divulgaré sus nombres. Solo diré que dos de ellos han sido directores de grupos musicales en la isla de mucho renombre y que uno de ellos hasta tiró cerca de tres mil dólares al piso, segundos antes y después, de que le dijeran redondamente que NO en su cara.
Alejandro Guerrero recientemente se unió al elenco de la serie policíaca «Tras la Huella», donde se espera que muestre una faceta diferente y desafiante en su carrera actoral.
Su participación en este proyecto de Tras la huella, ha generado gran expectación entre sus seguidores, presuntamente porque hará un papel diferente al que tiene en la telenovela Renacer.
A pesar de lo que parece ser un extenso trabajo actoral, el joven Alejandro Guerrero ha confesado que, debido a la difícil situación económica en Cuba, también trabaja como «botero» en La Habana.
Este dato curioso tampoco es sorprendente, pues muestra la realidad que muchos artistas cubanos enfrentan en la actualidad. De los primeros boteros artistas que se conocen, está el recientemente fallecido Enrique Molina, quien en los años 90´era habitual verlo en «la piquera» que había en la Fuente de la Fraternidad, al lado del hotel Cohíba y frente al Palacio de la Salsa, en el hotel Riviera.
Todos se buscaban y se buscan «sus pesos», pero cabría preguntarse si todos también estarían dispuestos a rechazar la «propuesta indecente» que le hicieron a Alejandro Guerrero «fuera de la pantalla».
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