La mala labor policial e investigativa en este caso, llevó a Rolando Di Gregorio a cumplir una larga condena siendo inocente y habiendo actuado en defensa propia
Tras pasar ocho meses en prisión preventiva en la cárcel El Típico de Las Tunas, donde su peso descendió a 43 kilos debido a la preocupación y la malnutrición, el italiano Rolando Di Gregorio obtuvo la libertad condicional bajo fianza en octubre de 2024. El 14 de marzo de 2025, el Tribunal Supremo de La Habana reconoció que Di Gregorio actuó en defensa propia durante la agresión por parte de Sciammarella y lo absolvió de los cargos de homicidio.
Di Gregorio describió su tiempo en prisión como una experiencia extremadamente dura, mencionando que estuvo confinado en una celda solitaria desde marzo hasta octubre de 2024, con una llamada telefónica semanal de 30 minutos como único contacto con el exterior. Antes de su traslado a la prisión, estuvo recluido en una habitación de la comisaría local bajo condiciones precarias, con una luz encendida las 24 horas que le impedía dormir y en compañía de insectos y roedores.
Tras la absolución, Di Gregorio espera completar los procedimientos burocráticos necesarios para regresar a Italia y reunirse con su esposa y sus tres hijos. Ha programado su vuelo de regreso para el 22 de abril de 2025, a un costo aproximado de 800 euros. La comunidad de Roseto degli Abruzzi, su ciudad natal, ha seguido de cerca su caso y espera con ansias su retorno.
El caso
El 1 de marzo de 2024, en la ciudad cubana de Las Tunas, ocurrió un incidente fatal que involucró al empresario italiano Francesco Sciammarella, de 76 años, y al carpintero italiano Rolando Di Gregorio, de 56 años. Según informes, la disputa surgió por la devolución de un anticipo de aproximadamente 500 euros que Sciammarella había entregado a Di Gregorio para la construcción de cuatro puertas. Mientras Sciammarella exigía la devolución en euros, Di Gregorio proponía realizarla en moneda local, lo que desencadenó una acalorada discusión.
Durante el altercado, Sciammarella agredió a Di Gregorio golpeándolo con un casco, causándole una herida en la ceja derecha. En un intento de defenderse, Di Gregorio empujó a Sciammarella, quien cayó al suelo y sufrió un traumatismo craneal que resultó fatal. Inicialmente, una autopsia sugirió que la causa de la muerte podría haber sido un golpe con un objeto contundente, lo que llevó a la detención de Di Gregorio bajo sospecha de homicidio.
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