Yordanis Cobos Martínez, cubano de 37 años acusado de decapitar a su jefe en Dallas, Texas, habría asesinado a Yunior Serrano hace 12 años en Cuba, según reveló esta semana la familia de la víctima a Cubanet.
De acuerdo con lo que afirmó en Facebook Mailen Estupiñán Ramírez, viuda de Serrano, su esposo fue asesinado a puñaladas por Cobos, dejándolas desamparadas a ella y a su hija, Claudia Serrano Estupiñán.
“Dios hace justicia, tarde pero llega. Este susodicho, lacra del mundo, fue el verdadero asesino del padre de mi hija. De más está decir que se pudra, por escoria”, subrayó Estupiñán al pedir pena de muerte para Cobos, natural de Mayarí, Holguín.
“Si en Cuba no hicieron justicia en el pasado, ahora mucho menos lo harán”, recalcó la familia al citado medio después de dejar claro que prefieren que el criminal sea procesado y juzgado en Estados Unidos.
Serrano sería la segunda persona asesinada por Cobos en Cuba, a tenor de lo que han expuesto los familiares de las víctimas.
Esta misma semana Roberto Peña, hijo del cubano Rolando Peña Almaguer, aseguró que Cobos habría asesinado a su padre en 2008 en la isla.
Amén de que el lunes la madre, la abuela y la hermana de Cobos declararon a Martí Noticias que él no había estado preso en Cuba ni habría matado antes, el familiar de Peña aseguró que incluso denunció el asesinato de su padre antes las autoridades migratorias estadounidenses en 2019, pero “le dijeron que era un caso de Cuba y que no había jurisdicción”.
Según la familia de Cobos, el joven homicida sufre problemas de salud mental desde su llegada a Estados Unidos.
Su madre, Odalis Martínez Rodríguez, aseguró: “Mi hijo salió mal de prisión en Estados Unidos, perdió la mente. Llegó a dormir en un parque como mendigo. Cuando por fin encontró trabajo en ese motel pensé que se estaba recuperando, pero discutía con el gerente porque no le pagaban”.
Cobos fue arrestado el 10 de septiembre en Dallas, tras atacar con un machete a su jefe, Chandra Nagamallaiah, frente a la esposa e hijo de la víctima, en el motel en el que trabajaba.
Testigos indicaron que después de decapitar a la víctima, Cobos pateó su cabeza antes de arrojarla a un contenedor de basura.
Mientras tanto, en Holguín, la familia de Cobos sostiene que necesita atención médica y que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, debería condolerse de él y enviarlo de vuelta a Cuba.
Cobos tiene una orden final de deportación a Cuba, por lo que estuvo bajo custodia del ICE en el Centro de Detención Bluebonnet, en Dallas, hasta que fue liberado bajo una Orden de Supervisión el 13 de enero de este año.
El presidente estadounidense aseguró que Cobos sería procesado con todo el peso de la ley. “¡Será acusado de asesinato en primer grado!”, remarcó al dejar claro que su gobierno tendrá mano dura con este tipo de criminales.
En este caso hay que tener en cuenta que Cobos ha sido acusado por un cargo de homicidio capital, que puede ser castigado con la pena de muerte en Texas y otros estados.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas anunció la presentación de una orden de detención federal para el arresto y la deportación del inmigrante indocumentado, quien fue detenido por las autoridades locales en Dallas tras decapitar a Nagamallaiah.
Igualmente, los registros judiciales sobre este sujeto muestran un largo historial de violencia en alrededor de nueve años en Estados Unidos.
