Andrés Fernández De La Paz, el cubano acusado de asesinar a balazos a su excuñado Ediesky Inocencio Piñeiro, también cubano, en la puerta de su casa en Houston, Texas, tienen un amplio historial delictivo.
El agresor, de 36 años, se encuentra actualmente detenido en la cárcel del condado de Harris, acusado formalmente de asesinato y con una fianza fijada en 500.000 dólares.
Allegados a la familia han revelado que la relación entre la víctima y Fernández, que fue esposo de una hermana suya durante al menos un año, era tensa.
Según contaron sus conocidos, el sospechoso había amenazado con matar a su expareja y a su familia, y luego huir a México.
Sin embargo, el detenido posee cargos por uso fraudulento de tarjetas de crédito en Estados Unidos y una orden de detención emitida por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) el pasado 28 de abril.
La Policía dijo además a Click 2 Houston que el acusado ha estado siendo investigado por el FBI desde 2022 como líder de una operación dedicada a clonar tarjetas en Texas.
En 2023 fue arrestado por colocar dispositivos en gasolineras y relacionársele con compras fraudulentas con tarjetas robadas, pero fue liberado bajo fianza.
Asimismo, ya había sido acusado de asesinato en 2016, un cargo fue desestimado por dudas sobre la autoría y una presunta legítima defensa.
Por si fuera poco, Fernández, que entró a Estados Unidos en 2014 con un parole temporal que expiró, tiene múltiples órdenes de detención migratoria anteriores.
Ahora, está acusado por un crimen que tuvo lugar el domingo 27 de abril en una vivienda del suroeste de Houston, que quedó grabado por cámaras de seguridad.
En las imágenes, que se han hecho virales, se observa cómo Fernández se acercó a la puerta de la vivienda de su excuñado, sacó un arma de su short y le disparó mortalemnte sin mediar palabra.
La Policía explicó que un poco antes Fernández había golpeado violentamente la puerta de la víctima y roto las ventanas. Poco minutos después regresó, tocó de nuevo la puerta y, al abrirle Piñeiro, lo mató.
Pese a que Piñeiro logró cerrar la puerta con llave tras recibir el disparo, ya que en el interior de la vivienda se encontraban su esposa y sus dos hijas menores, las heridas resultaron mortales.
Según el testimonio de la esposa del fallecido, que murió en el Hospital General Ben Taub, presenciar el crimen fue un momento traumático para las niñas.
La víctima, de 34 años, también ha dejado una hija en Cuba, ahora huérfana de padre.
Fernández fue arrestado el lunes 28 de abril, por la policía de Houston en su residencia de la localidad de Katy. Este miércoles compareció en la corte 482 del condado de Harris, donde se le informó oficialmente del cargo en su contra.
Tanto Piñeiro como Fernández son naturales de Manzanillo, en la provincia cubana de Granma. La víctima había llegado a Estados Unidos hacía menos de un año y trataba de abrirse camino como padre y proveedor para su familia.
