Tras las denuncias sobre la inoperancia y la negligencia del sistema de salud cubano ante el caso del cubano Andy Agüero Barrios, de 26 años, fallecido en El Cotorro por falta de atención médica, la Dirección Provincial de Salud de La Habana emitió un comunicado oficial donde traspasa parte de la responsabilidad a Maritza Barrios, la madre del joven y reconocieron malos procedimientos del personal de la ambulancia del Sistema Integrado de Urgencias Médicas que lo atendió.
La Dirección de Salud habanera refiere que Andy, quien presentaba antecedentes de autismo y “discapacidad visual secundaria a Neuritis Óptica Hereditaria (Enfermedad de Leber)” presentó “fiebres, diarreas y vómitos” el pasado 24 de junio y fue “evaluado en el domicilio por el médico y enfermera de la familia, proponiéndose realizar ingreso hospitalario, a lo cual la madre se negó en dos ocasiones. Ante la negativa familiar se mantiene seguimiento en el domicilio con tratamiento médico”.
Según el comunicado, el día miércoles 13 de junio, víspera de la muerte “es valorado nuevamente por presentar deposiciones diarreicas, procediéndose a realizar estudios en el policlínico que resultan alterados y se decide remitir”, y los funcionarios aseveran que “recibió atención médica en todo momento” en el policlínico Rafael Valdés.
Reclaman que la familia de Andy Agüero se negó a la realización de una necropsia a su cuerpo para determinar las causas de la muerte e informaron que en “visita realizada al domicilio se conoció a través de la información aportada por la abuela materna la insatisfacción con la calidad de la atención por el personal de la tripulación de la ambulancia que trasladó el paciente desde el policlínico hacia el hospital, lo cual fue comprobado durante la investigación realizada y en consecuencia serán adoptadas las medidas correspondientes.”
Maritza Barrios y su familia ofrecieron una entrevista al medio independiente CiberCuba en pos del derecho a réplica, y declaró que se negó a ingresar a su hijo en parte por las deficientes condiciones higiénico-sanitarias que presentan los hospitales cubanos y porque esto implicaba dejar el cuidado de un segundo hijo, Jianny Pérez Barrios, también ciego, a su madre de 72 años, que además debe ocuparse de las tareas externas para que su hija permanezca en el hogar atendiendo a sus hijos.
La cubana refirió que solicitaron varias veces atención médica para Andy en el domicilio, pues este presentaba un comportamiento agresivo, pero siempre obtuvo la negativa por parte de las autoridades médicas municipales y provinciales.
“Su mamá era la única persona que podía controlarlo y por eso pedimos ayuda infinidad de veces”, explica una tía de Andy Agüero, “porque solo se controlaba estando en la casa, cerca de ella”, y cuestionó: “¿Dónde está la psiquiatra que dijo en 2019 que no la atendería en la casa? De eso no hablaron en el comunicado”.
“Se cometieron muchas negligencias y estamos sufriendo la pérdida de alguien muy querido, y ahora resulta que los culpables somos nosotros”, declaró, aseverando que “aunque mi hermana haya dicho que no quería ingresar a Andy, los médicos no tenían derecho a abandonarlo a su suerte. Nunca más lo visitaron ni dieron seguimiento, jamás se encargaron de saber en qué condiciones estaba.”
La tía denunció además que le fue retirada la dieta a su sobrino y se nunca obtuvo respuesta de las autoridades a las que se apeló al respecto, por lo que consideran como familia que las autoridades cubanas quieren “evadir responsabilidades” y han omitido informaciones importantes, como el detalle de que los enfermeros del vehículo SIUM no comprobaron las constantes vitales del joven ni le pusieron oxígeno, además de ir escuchando música durante el recorrido. Algo registrado en gran parte por un video tomado por un celular durante el traslado del paciente.
“No quieren que se sepa la verdad, están mintiendo y saben que se equivocaron. Después que se murió mi sobrino, una comisión del gobierno fue a la casa a hablar con mi hermana y a preguntarle qué necesitaba. Ya era demasiado tarde, no había nada qué hacer. Ella les dijo que se fueran”, comentó la tía del fallecido.
