El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) anunció este jueves un incremento a los costos de algunos trámites migratorios, que ya habían subido en julio pasado, a partir del 1 de enero de 2026.
Según explicó la agencia en un comunicado, los ajustes de estas tarifas, publicadas en el Registro Federal, responden a la inflación acumulada entre julio de 2024 y el mismo mes de este año, de acuerdo con la ley de presupuesto para el año fiscal 2026.
“A partir del año fiscal 2026, y continuando durante cada año fiscal posterior, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ajustará algunas de estas tasas por inflación, tal y como se especifica en la legislación”, indicó la comunicación oficial.
USCIS issued a Federal Register notice to increase certain immigration-related fees we charge as mandated by the One Big Beautiful Bill. @DHSgov will continue to adjust these fees for inflation each fiscal year.
— USCIS (@USCIS) November 20, 2025
Our new fees are effective on or after Jan. 1. 2026. We will… pic.twitter.com/Dwq4twSrBX
El anuncio especifica que si se presenta una solicitud de prestaciones con matasellos a partir del 1 de enero de 2026, deberá incluir la nueva tasa correspondiente al servicio o documento solicitado.
Los aumentos van desde los diez dólares hasta los cinco, como el aplicado a la autorización de empleo, que subió de 550 a 560.
También el nuevo cobro para los solicitantes de asilo, que es 100 dólares, impuesto en la nueva ley presupuestaria, se incrementó en diez dólares.
La aplicación al Estatus de Protección Temporal (TPS) pasará de 500 dólares a 510, y su renovación, de 275 a 280.
En tanto, quedan sin incremento tres solicitudes: la tasa inicial para extranjeros que presentan una solicitud de asilo (documento I-589), cuyo costo es de 100 dólares; la renovación o prórroga del EAD del solicitante de asilo (I-765), que es de 275; y la tasa especial para inmigrantes menores de edad (I-360), de 250.
USCIS es una agencia gubernamental que basa la mayoría de presupuesto en los pagos hechos por los mismos inmigrantes.
No obstante, este nuevo aumento de los costos ha sido mal visto por quienes creen que excluye a las personas de bajos recursos, así como a refugiados y solicitantes de asilo.
