Los casos aquí reunidos, denunciados por los activistas e informadores cubanos Niover Licea y José Luis Tan Estrada, forman un mismo cuadro, aunque sucedan en provincias distintas y con actores distintos. En el servicio militar de un muchacho de 18 años, en los pasillos de Taco Taco, en la Prisión Pendiente de Santa Clara, en la cárcel de Panamá en Güines, en el cuerpo de guardia pediátrico de Cienfuegos y en la sala donde un anciano esperó una ambulancia, se repiten palabras como abuso, abandono, extorsión, castigo, silencio. Y se repiten, también, los nombres de quienes deberían responder: jefes de prisión señalados como Yurianis Spek, Ángel Figueroa "Redondeaow", Islander Laffita Turro y el primer teniente Fabelo, amparados, según denuncias, por superiores como Carlos Quintana y Juan Ramón Castillo. La exposición de esos rostros no es un acto de venganza: es una forma de registro público cuando las vías institucionales fallan o se cierran.
Yordano Cordoví Kindelán intentó asesinar, presuntamente, a su expareja Daichel Santiesteban Borrue. Esta, sobrevivió al ataque, ejecutado con un arma blanca. Los hechos ocurrieron en Güines, Mayabeque.
Tomadas en conjunto, estas historias dibujan un patrón: donde faltan controles, proliferan las sospechas; donde la información oficial es escasa, crecen el rumor y la indignación.
La designación no habla solo de Crespo Baquero; habla del sistema que la produce y la protege. En Cuba, el mérito que pesa no es la gestión pública verificable, sino la lealtad y la utilidad narrativa. Por eso, aunque el currículum exhiba baches, el ascensor ideológico sigue funcionando.
La víctima del incendio fue trasladada con vida al Hospital Miguel Enríquez, en La Habana, pero no logró sobrevivir a las heridas y falleció en horas de la tarde. Hasta el momento no se ha revelado públicamente la identidad del fallecido, aunque se confirmó que vivía en una de las casas afectadas.
Ramón Aguilar Castillo, director de Salud Pública en el territorio mayabequense, informó que el virus fue detectado “mediante acciones de seguimiento y vigilancia de síndromes febriles inespecíficos” y luego fue corroborada en los exámenes hechos en el laboratorio nacional de referencia del Instituto Pedro Kourí (IPK), en La Habana.
El hecho ocurrió en el poblado de Aguacate, en la provincia de Mayabeque, el pasado 31 de diciembre en horas de la tarde. La mujer fue transportada de urgencia hacia el policlínico de la localidad y de ahí fue remitida al hospital de San José de Las Lajas, donde actualmente se encuentra hospitalizada con pronostico de "grave".