Una ciudadana venezolana de 64 años fue sancionada en Cuba por su vinculación con el tráfico de drogas. El Tribunal Provincial Popular de Santiago de Cuba dictó sentencia en el juicio correspondiente a la causa 59 de 2025, donde quedó probado que la mujer, quien llegó al país con visa de turista en marzo de 2024, intentó ingresar al territorio cubano una importante cantidad de clorhidrato de cocaína. La droga, de 93% de pureza, estaba oculta en cajas de mezclas para tortas y waffles que transportaba en su equipaje. La detención ocurrió en el Aeropuerto Internacional Antonio Maceo, donde las autoridades aduaneras descubrieron el narcótico.
La sanción impuesta fue de 12 años de privación de libertad, además de otras penas accesorias, como la prohibición de salida del país y el comiso de la droga, dinero y su teléfono móvil. La justicia cubana reafirmó su postura de tolerancia cero frente a delitos relacionados con el narcotráfico, dejando claro que la seguridad y bienestar de la población prevalecen ante cualquier acto ilícito.
Otros casos relacionados en la misma provincia
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El Tribunal Provincial de Santiago de Cuba también dictó resolución sobre otros casos de tráfico de drogas en la misma región. Uno de los más notorios involucró a un hombre de 25 años, quien fue condenado a 12 años de prisión por su participación en una red de narcotráfico que operaba desde Surinam. El acusado fue arrestado en septiembre de 2024 con 260 gramos de cocaína y más de 47 mil pesos cubanos, producto de las transacciones de drogas. Este individuo, además de comercializar cocaína, estaba vinculado a la venta de marihuana. La pena de 12 años también incluye la privación de sus derechos y la prohibición de salida del país.
Otro caso relacionado es el de un joven de 23 años que, desde 2024, operaba en la venta de marihuana en la ciudad de Santiago de Cuba. Fue detenido en septiembre de ese mismo año con 77 envoltorios de marihuana, lo que equivalía a 500 cigarrillos. El Tribunal lo sentenció a 8 años de prisión, considerando sus antecedentes penales y su comportamiento delictivo persistente. Este joven utilizaba marihuana y clorhidrato de cocaína, y su actividad ilegal le permitía obtener ganancias rápidas y sin escrúpulos.
Cada uno de estos casos refleja, según señala el diario Sierra Maestra, el esfuerzo constante del sistema judicial cubano por enfrentar el narcotráfico, imponiendo sanciones que no solo castigan, sino que también sirven de advertencia a quienes buscan lucrarse a costa de la salud y seguridad de la sociedad.
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