Un nuevo sismo de 4,3 grados de magnitud en la escala de Richter impactó en la madrugada de este lunes al oriente cubano.
El temblor fue registrado a la 1 y 52 a.m. y tuvo su epicentro a 34 kilómetros al sureste de la región de Pilón en la provincia de Granma, según declaraciones en redes sociales del Dr. Enrique Arango Arias, Jefe del Servicio Sismológico Nacional.
Arango puntualizó que el sismo tuvo una profundidad de 10 kilómetros mientras Radio Bayamo indicó que tuvo una perceptibilidad en diversas regiones de Granma y Santiago de Cuba.
Hasta el momento no se han reportado daños materiales o humanos por este nuevo sismo que afectó al oriente cubano.
El movimiento telúrico ocurre tras los potentes sismos reportados el pasado 10 de noviembre en el oriente cubano y que provocaron importantes daños materiales en viviendas y lesionados, así como afectaciones en el tendido eléctrico. Una veterana periodista de la emisora Radio Bayamo señaló que hubo dos víctimas mortales pero las autoridades negaron fallecidos por los terremotos, con una magnitud de 6, 0 y 6, 7 grados.
Ambos terremotos provocaron miles de réplicas que han mantenido la preocupación entre los habitantes del oriente cubano.
Estos fenómenos ocurrieron en medio de la grave crisis que vive el país marcada por los largos apagones, el desabastecimiento y la inflación que ha disminuido considerablemente el nivel de vida de los cubanos.
Esta compleja situación se ha incrementado en varias zonas de la región oriental por el paso del huracán Rafael, que aparte de los graves daños materiales provocó cerca de una decena de víctimas humanas de acuerdo a cifras oficiales.
Los potentes sismos en esta región de Cuba dejaron a decenas de familias sin sus viviendas habituales, las cuales han sido ubicadas en casas de campaña por las autoridades locales.