Tras dos años de batallas legales a puertas cerradas, un árbitro de disputas dictaminó que el actor Kevin Spacey debe pagar 31 millones de dólares por conducta sexual inapropiada detrás de escena, a la empresa MRC (Media Rights Capital), productora de la exitosa serie de Netflix House of Cards, tras la presentación del caso en el Tribunal Superior de Los Ángeles, según informó Hollywood Reporter.
El árbitro provisto por la JAMS, de resolución alternativa privada de disputas —que cuneta con la experiencia de más de 400 jueces de cortes estatales y federales retirados— dictaminó que Spacey incumplió repetidamente sus obligaciones contractuales de proporcionar servicios «de manera profesional» y «de conformidad con las instrucciones, prácticas y políticas razonables» de MRC, como los protocolos contra el acoso, luego de que el actor, quien encarnara al protagónico Frank Underwood, fuera excluido de la serie tras graves acusaciones de abusar sexualmente de hombres jóvenes, incluido un asistente de producción
Las investigaciones internas desarrolladas por MRC condujeron a la suspensión de los contratos de actuación y producción que tenían con Spacey, quien demandó a su vez a la empresa, interviniendo entonces los expertos de JAMS.
El árbitro apuntó que MRC sufrió daños creativos y monetarios por tal conducta de Kevina Spacey, como el retraso de la sexta temporada de House of Cards para reescribirla por completo, acortándola de los 13 capítulos originales, a solo ocho episodios y así poder cumplir con los plazos de entrega.
El árbitro no consideró de peso los argumentos de Spacey de que aún tenía derecho a dinero debido a la naturaleza de sus negociaciones con MRC pues las decisiones tomadas por esta empresa y por Netflix de despedirlo fueron las que causaron las referidas pérdidas financieras, y no su conducta violatoria de los estatutos sobre el acoso sexual.
Los ejecutivos de MRC declararon en un comunicado que «la seguridad de nuestros empleados, escenarios y entornos de trabajo es de suma importancia para MRC y por eso nos propusimos exigir la responsabilidad», celebrando que “MRC se mantuvo firme, siguió este caso con tenacidad y al final obtuvo el resultado correcto.”
Kevin Spacey, de 62 años, fue originalmente imputado por MRC en 2017, de acosar cinco años antes, justo a inicios del rodaje de la primera temporada de House of Cards, a un empleado que lo condujo al hospital para tratarse una quemada en una mano, producto de sostener una bandera en llamas durante una toma promocional. Varias fuentes presentes en el set informaron a Hollywood Reporter que Spacey en efecto “manoseó” sin permiso al asistente, quien incluso se quejó al respecto con un superior.
