En un reciente encuentro en el juego de baloncesto del hijo de Ben Affleck, la pareja de Hollywood, Jennifer López y Ben Affleck, optó por besos en el aire en lugar de besos reales, desatando todo tipo de especulaciones sobre su relación. Eso sí, a pesar de los rumores de tensión, la pareja se mostró cordial y amigable, aunque sin demostraciones públicas de afecto directo.
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El reporte de los medios sobre este «encuentro» llega en un momento en que circulan rumores sobre posibles desafíos en su matrimonio relacionados con las finanzas y la crianza de los hijos, según informó Yahoo Entertainment hace dos días. La fuente sugiere que la pareja está lidiando con diferencias significativas que han puesto su relación en una especie de limbo emocional y práctico.
De hecho, que ambos hayan llegado – al igual que en el cumpleaños de la hija de Affleck – en vehículos distintos y desde distintos lugares, sustenta la narrativa del divorcio. Eso sí, las fotos del momento se han vuelto virales, lo que añade más confusión sobre el estado real de su relación.
Este gesto público podría ser un intento de desmentir los rumores o simplemente un momento espontáneo de afecto, y subraya la complejidad de las relaciones en la vida de celebridades, donde los momentos personales se vuelven públicos y cada acción puede ser interpretada de múltiples maneras.
Pero, ¿qué ha pasado?
Una fuente cercana a la pareja, citada por News18 dijo en mayo que Ben aparentemente «no está de acuerdo con el estilo de vida de Jennifer» y se sentía «desgastado» por el matrimonio. También afirmó que “ambos tienen carreras exigentes que muchas veces les exigen estar en ciudades diferentes”. Se dice que esta es una de las razones principales que causó tensión entre Ben y López.
Un informe de Entertainment Tonight publicado la semana pasada, señala que la pareja “todavía está luchando” por su matrimonio. Informó que aunque los dos íconos de Hollywood están “lidiando con algunos problemas”, quieren “arreglar las cosas” y “aún no han terminado”.
“Jen se ha sentido presionada con todos sus compromisos laborales y Ben es más tranquilo y no le importa Hollywood y todo lo que conlleva. Él siente que los altibajos son parte de la vida y todos tenemos esos momentos”, afirmó una fuente citada por el portal de entretenimiento y luego agregó: “Volvieron a su relación con la esperanza de que los problemas pasados no se repitieran, pero desafortunadamente, algunos de ellos son».
Esto pudiera tener mucho sentido si tenemos en cuenta la reciente movida de J-Lo de cancelar su gira para dedicarle más tiempo a su familia. Al parecer la actriz está dando pasos en esa dirección, pues fue vista con su hijo Eme en un mercado, según cubrió Page Six. El dúo madre-hijo fue fotografiado charlando mientras compraban en un mercadillo de Los Ángeles el domingo.
Jennifer López y Ben Affleck continúan navegando por su relación bajo el intenso escrutinio público, tratando de manejar su unión, sus carreras y sus familias en un equilibrio siempre delicado. La aparición de besos en el aire en un evento deportivo es solo un ejemplo más de cómo manejan su vida pública juntos, manteniendo un frente unido ante los ojos del mundo.