Cuando una parte de los residentes en el sur Florida se prestó a despedir el año en las playas de Miami Beach, probablemente nadie imaginó que los bikinis y bañadores usados para recibir el 2022 a golpe de música y tambores iban a sustituirse a pocos días por indumentarias de invierno.
Aunque en ciudades como la propia Miami o Tampa, aún no se noten cambios drásticos en las temperaturas, una vecina no tan lejana al noroeste del llamado Estado del Sol, precisamente en el condado de Okaloosa registró inusual nevada en la madrugada del 3 de enero.
Las primeras imágenes de la nevada en Okaloosa las compartió un oficial de policía del condado, quien además convidaba a los ciudadanos a que se abrigaran en una situación que empezaba a parecerse a la de otras ciudades del país, las cuales se encuentran desde hacía días sumidas en fuertes tormentas de nieve.
Con un frente frío a la vista y el antecedente de Okaloosa, que registraba 75 grados Fahrenheit, en las horas antes de caer la nieve, los residentes de la zona tienen suficientes motivos para mantenerse expectantes al clima de los días por venir. Quién sabe si les toque vivir una nevada parecida a las que de manera esporádica han sorprendido ese territorio.
Las pocas veces en que se ha visto nieve en la Florida, sobre todo en la ciudad de Miami, han ocupado titulares en los medios de comunicación debido a la rareza del fenómeno. No obstante, varios expertos han indicado que esta vez las condiciones al sur de la Florida no son las mejores para que se produzca nevada alguna.
En tanto, las bajas temperaturas de los próximos días sí son un hecho y colocan las alertas sobre los cuidados personales, mucho más en un escenario marcado por la pandemia de Covid19 y otras afecciones respiratorias.
El invierno de 2021-2022 en los Estados Unidos inició el pasado 21 de diciembre y finalizará el próximo 20 de marzo. Aunque algunos territorios del país son más propensos a las nevadas, como Texas, Washington, New York, Boston y Ohio entre otros; no por esperados y habituales estos fenómenos ambientales dejan de resultar peligrosos.
Las nevadas no son más que una forma sólida de la lluvia. Es decir, en lugar de precipitarse agua, lo que cae del cielo es nieve abundante, producto de las bajas temperaturas y sobre todo de la humedad que presente la zona en cuestión, lo cual hace que el agua se transforme en copos de nieve, y caiga.
Sucede que históricamente se asociaba este tipo de fenómeno a zonas exclusivamente frías, algo que con los comportamientos del cambio climático ha debido mutar y ya no solo pueden verse en zonas árticas o de muy baja temperatura, sino que cada vez son más frecuentes en lugares como La Florida o de naturaleza similar.
Aunque las nevadas que se han producido durante los últimos días en el territorio de los Estados Unidos han provocado víctimas y destrozos materiales, las versiones más fuertes de este tipo de eventos climatológicos suele tener lugar en espacios poco habitados por los seres humanos.
En el propio estado de La Florida, novedades de este tipo en años anteriores, como en 2018, por ejemplo, ha llegado a provocar la suspensión de servicios públicos, así como el cierre de calles y avenidas.
