Las historias de Anita y Yaima son ejemplos de cómo las mujeres cubanas pueden adaptarse, prosperar y dejar una huella en España.
En España, dos mujeres cubanas han encontrado su hogar y han sabido integrarse en una cultura que les ha permitido redescubrirse. Una comparte su amor por la gastronomía y la otra lidera con éxito su propio negocio. Estas son sus historias.
Anita Mateu: De Galicia a las redes sociales
Anita Mateu, una creadora de contenido nacida en Cuba y residente en Galicia, de la que en otras ocasiones hemos hablado acá, ha cautivado a sus seguidores narrando su proceso de adaptación a la vida española, en especial su fascinación por la gastronomía. En uno de sus vídeos más virales, Anita hizo un ranking de los diez platos españoles que más le gustan, demostrando su pasión por la comida.
En su lista, las croquetas ocuparon el primer lugar: «Es lo que más me gusta. A todos los lugares a los que voy, las pido», confesó. También destacó la tortilla de patatas y el jamón, describiéndolos como «lo más rico». Aunque las opciones dulces, como los churros, no son sus preferidas, su honestidad y humor han conquistado a su audiencia.
La vida en Galicia no solo le ha permitido explorar la riqueza culinaria de España, sino también comparar la calidad de vida con la que dejó atrás en Cuba. Anita comparte con sus seguidores las diferencias entre ambos países y cómo se siente “rica” disfrutando de un estilo de vida que en su tierra natal habría sido imposible.
@anita.mateu Mi comida española favorita 🤍 #comida #comidaespañola #cubana #parati ♬ sonido original – anita mateu 🤍
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Yaima Muñoz: Dueña de un bar en Euskadi (ver fotos y más info aquí)
Yaima Muñoz, por su parte, llegó hace 15 años al País Vasco en busca de mejores oportunidades. Hoy, es una empresaria exitosa que regenta el bar Gure Trena, ubicado en Urretxu. Nacida en Camagüey en 1979, Yaima estudió hostelería en Cuba antes de emigrar con su familia. Desde entonces, ha trabajado arduamente para construir una vida estable y próspera en España.
Al llegar, comenzó cuidando a una señora mayor y luego trabajó en el hotel Castillo de Olaberria. Su trayectoria en la hostelería fue en ascenso, desde atender bares en Zumarraga hasta gestionar establecimientos como el Monterrey y, finalmente, el Gure Trena. Este último, situado en una zona de gran movimiento, se ha convertido en su mayor logro profesional.
Yaima aprecia especialmente la libertad que ha encontrado en España. “Aquí puedo trabajar en lo que quiera. En Cuba, no. Allí es mucho más difícil encontrar un buen trabajo, pues las cosas están cada vez peor”, explica. Además, destaca lo acogedora que ha sido la comunidad de Urola Garaia, donde se integró desde su llegada.
El Gure Trena ha sido todo un éxito, especialmente durante las recientes festividades navideñas y de Santa Lucía, cuando el bar estuvo lleno de jóvenes disfrutando de la animada vida social de la zona. Aunque el trabajo es demandante, Yaima se siente satisfecha con el dinamismo de su negocio.
En su poco tiempo libre, le gusta visitar la playa de La Concha en Donostia, su favorita, y viajar a Cuba cada dos años para ver a su padre. Aunque extraña el sol de su tierra natal, se ha adaptado bien al clima vasco. «Cuando voy a Cuba, me parece que hace demasiado calor», comenta con una sonrisa.
Dos historias de éxito
Las historias de Anita y Yaima son ejemplos de cómo las mujeres cubanas pueden adaptarse, prosperar y dejar una huella en España. Mientras Anita ha encontrado en las redes sociales un espacio para reflexionar sobre su vida entre dos culturas, Yaima demuestra que con trabajo y perseverancia es posible construir un futuro sólido.
Desde los verdes paisajes de Galicia hasta los bares de Euskadi, estas dos cubanas celebran la vida en España, llevando consigo el sabor y la resiliencia de su tierra natal.