El gobierno cubano ahora implementa su campaña de vacunación en la población infantil y adolescente, pero muchos padres -como La Diosa- tienen sus reservas.
La Diosa vuelve a enfrentarse a la dura pesadilla de la Covid-19, aunque esta vez no de manera tan triste como tras la pérdida de un ser querido. La cantante cubana ha sido notificada para vacunar a sus hijos contra el virus, y esta asegura que no accederá.
En sus redes sociales, la intérprete musical compartió con sus seguidores que le había llegado una citación de la escuela de su hijo para una reunión de padres relacionada con la campaña de vacunación que ya está en marchan en la isla, e incluye a menores de entre 2 y 18 años de edad.
Dianelys Alfonso Cartaya, nombre real de La Diosa, aseguró que ninguno de sus retoños va a ponerse la Soberana 02, el candidato vacunal que se está empleando en estos casos.
«Y me llamaron de la escuela de mi hijo para una reunión. No son tiempos de reunión, dicen que hablarán de la vacuna. Mis hijos no se vacunan», escribió la cantante en Instagram.
«Yo decido por mis hijos, ahí mando yo», expuso la artista urbana en el encabezado de su publicación, en la cual además se proyectó de acuerdo con las teleclases como forma de reiniciar el curso escolar, pero «hasta ahí, vamos a ver si nos ponemos serios».
Las últimas semanas no han sido fáciles para Alfonso Cartaya. Primero, ella y su esposo, Rey el Mago, comenzaron a sentir síntomas de la enfermedad, y carecían de medicamentos para enfrentarla. Luego, se contagia su madre, quien tristemente no pudo vencer al virus, y terminó falleciendo, además con sufrimiento, por las negligencias de las que fue víctima mientras estuvo ingresada.
Pero la agonía de Dianelys no terminó con la muerte de su progenitora, llegado el momento de cremar el cuerpo de la señora -tal como ella había pedido en vida-, otro calvario se plantó frente a la cantante: no había dónde incinerarla.
En medio de aquella situación, ya en la fase de desespero, La Diosa solicitó ayuda a sus seguidores, todo ello en medio de gritos y llanto de dolor.
Las dudas y temores dentro de la población cubana sobre este nuevo proceso de vacunación son cada vez más crecientes, pues su aplicación se está haciendo de forma apresurada y sin estar avalada por ninguna organización internacional competente.
No obstante las autoridades sanitarias de la isla aseguran que la vacunación de niños y adolescentes podría ayudar a frenar las elevadas cifras de pacientes menores de 18 años en el país.
