Cuba, Venezuela y Cuba se relacionan en nueva noticia, pero no precisamente una que habla de “solidaridad”, “antimperialismo” o el ALBA TCP, sino respecto a otro suceso que revela una cara muy diferente de las relaciones entre estos países. Alrededor de 300 cubanos protagonizaron en La Habana una protesta masiva en el Centro de Negocios de Miramar, frente a las oficinas de la aerolínea venezolana Conviasa, que no ha reprogramado vuelos pendientes a Managua tras dos años de retraso.
Un video compartido en su canal de Youtube por el periodista Mario J. Pentón revela a este grupo de cubanos coreando a gritos “Queremos fecha de vuelo”, dado que vieron frustradas sus esperanzas de lógica reprogramación de vuelos comprados a inicios de 2020 a la compañía venezolana, y cancelados con motivo de la pandemia de la covid-19, luego que reiniciaran las operaciones aéreas a gran escala en Cuba tras el 15 de noviembre de 2021, incluyendo Conviasa.
La compañía venezolana anunció entonces que sus aviones volarían miércoles y sábados entre La Habana y Managua, con la única exigencia de la presentación de un PCR negativo realizado durante un plazo inferior a las 72 previas. Igualmente dieron a conocer en su web oficial que los pasajeros con boletos afectados hasta marzo de 2021 tendrían la oportunidad de cambiarlos por nuevas fechas “sin pago de penalidad ni diferencia tarifaria”. El aviso añadió que “en caso de no tener fecha prevista su boleto tiene validez de un año contando desde la fecha de emisión”.
”Vamos a estar reprogramando vuelos a las personas que ya tenían comprado. En caso de fallos, irán vendiendo boletos a los de la cola normal», precisó una empleada de Conviasa según aparece en un video publicado previamente por 14 y medio. Igualmente se explicaba que a partir del 1ro. de enero de 2022 la compañía vendería normalmente los pasajes para ese destino.
El silencio posterior y absoluto de Conviasa respecto a los pasajes cancelados casi dos años atrás, y su decisión de seguir vendiendo nuevos pasajes, según declararon al medio Cubanet varios de los cubanos congragados en el centro de Miramar, provocó tal estallido frente a la filial de la compañía en Cuba.
“Ahora no nos dejan volar y sabemos que están vendiendo pasajes, que los vuelos se están yendo vacíos y nosotros estamos aquí sin poder volar a Nicaragua…”, se lamentó otro manifestante ante los reporteros del referido medio independiente, asegurando que el precio actual es de 3000.00 MLC.
Esta alza desorbitante coincide con el anuncio gubernamental nicaragüense el 22 de noviembre pasado de la concesión de “libre visado” a los cubanos que deseen viajar a esta nación centroamericana, pretextando “la cantidad de solicitudes de hermanos ciudadanos cubanos con familiares en Nicaragua, y con el fin de promover el intercambio comercial, el turismo y la relación familiar humanitaria”.
Esta situación fue vista por muchos cubanos como una oportunidad para salir de Cuba tanto en busca de una ruta migratoria hacia los Estados Unidos que sorteara la difícil travesía por la selva del Darién, o bien para ir en busca de mercancías que luego revenderían en la Isla.
