La historia del cubano Asad Barata – sí, es cubano – es la historia que resume el deseo de los migrantes cubanos: irse de Cuba.
No importa donde sea, no importa lo que haya que hacer, la decisión es irse y todo lo que venga luego será en función de eso. Asad primero intentó emigrar vía Rusia, pero cuando la guerra con Rusia lo sorprendió, optó por visitar «los volcanes de Nicaragua».
La historia de Asad es muy similar a la de Jorge, un migrante cubano que en enero del 1993 se consiguió una carta de invitación para irse de Cuba, rumbo Suecia y ya en el avión sintió que varios miembros de la Seguridad del Estado lo vigilaban. Quienes lo «vigilaban» eran personas corrientes, preocupados por aquel que viajaba a Estocolmo en enero ¡sin abrigo!
Y es que el destino no importa, lo importante es salir y el cubano Asad Barata es perfecto para contarlo.
“Me siento feliz, porque es duro y espero estar realmente en el país de la libertad, en donde todos los que estamos aquí hemos luchado para poder llegar. Regresar a Cuba nunca fue una opción”, expresó este cubano a las cámaras y micrófonos de Telemundo.
Estuvo un año y medio por aquellos lares europeos cuando lo sorprendió la guerra. Decidió, de conjunto con su esposa, viajar a Nicaragua, sin saber que le depararía el destino, pero cualquier opción era mejor que las bombas.
“A los cinco o seis días de la guerra tuve que salir del país, manejando hasta llegar a Europa [occidental] y desde allí hacer solo hasta aquí mi travesía, como un cubano que quiere libertad”, comentó el joven al medio estadounidense.
Luego de varias jornadas por varios países centroamericanos, Asad finalmente cruzó el río Bravo. Se entregó a la Patrulla Fronteriza de Eagle Pass, Texas, y pidió asilo político en los Estados Unidos.
Dice que Cuba está «peor que Ucrania», porque en el país europeo por lo menos había comida.
«En Cuba, supuestamente ellos dicen que todo está bien y no hay guerra, y no hay comida, y sí represión a la gente”., señaló.
Casi 80 000 cubanos llegaron a EE. UU. entre el 1 de octubre de 2021 y el 31 de marzo de 2022, según las estadísticas más recientes del Departamento de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP, siglas en inglés).
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