Cientos de brasileños que rechazan la victoria de Lula en las elecciones del año pasado tomaron por asalto este domingo el Congreso, el Palacio Presidencial y la Corte Suprema del país.
En un hecho que recuerda a la invasión del Capitolio de los Estados Unidos por seguidores de Donald Trump en enero de 2021, una turba de simpatizantes de Jair Bolsonaro logró burlar los mecanismos de seguridad y causó estragos en los tres edificios.
Gravísimo lo que está pasando en Brasil, donde un bando no reconoce el resultado de elecciones democráticas y quiere tomar el poder por asalto.
Recuerda al ataque al Capitolio en EEUU. Liderazgo de Bolsonaro y Trump son un riesgo para la democracia pq no creen en sus valores. pic.twitter.com/cIP5bkK2D8— Vlado Mirosevic (@vladomirosevic) January 8, 2023
“Lo que estamos presenciando es un ataque terrorista”, dijo el presentador de noticias Erick Bang en la cadena de televisión GloboNews mientras se difundía la noticia. “Los tres edificios han sido invadidos por terroristas golpistas”.
Impactantes videos e imágenes difundidas en las redes sociales muestran a los militantes pro-Bolsonaro corriendo por la rampa hacia el Palácio do Planalto, ingresando a las oficinas presidenciales y rompiendo las ventanas de la corte suprema cercana.
Desde que el veterano izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva prestó juramento como nuevo presidente de Brasil, miles de extremistas pasaron las últimas semanas acampando frente a las bases militares en todo el país y pidiendo un golpe militar.
Finalmente, este domingo, marcharon desde el cuartel general del ejército en Brasilia hacia el corazón de la política brasileña, la Plaza de los Tres Poderes. Muchos de ellos portaban la bandera amarilla y verde de Brasil, que se convirtió en un símbolo del movimiento de extrema derecha de Bolsonaro.
Los políticos de izquierda expresaron conmoción e ira a medida que avanzaba la horda. “¡El Congreso Nacional está siendo atacado por TERRORISTAS!” tuiteó el senador Randolfe Rodrigues.
Poco después, otro destacado aliado de Lula, André Janones, compartió imágenes que mostraban a decenas de radicales dentro de los terrenos del Palácio do Planalto, donde se llevó a cabo la ceremonia de toma de posesión la semana pasada. “Los terroristas han invadido el Planalto”, tuiteó Janones.
“Bolsonaro y su equipo han mirado muy de cerca lo que sucedió el 6 de enero tratando de entender por qué un presidente en ejercicio fracasó en su esfuerzo por anular los resultados de las elecciones”, dijo a The Guardian el exembajador de EEUU en Brasil, Thomas Shannon.
Bolsonaro, que guardó silencio tras la derrota y cuyo principal aliado internacional era precisamente Trump, salió de Brasil en vísperas de la toma de posesión de Lula y actualmente se encuentra en Florida.
El incidente ocurre después de que, el 13 de diciembre, los simpatizantes de Bolsonaro intentaron asaltar la sede de la policía federal en Brasilia e incendiaron autobuses y automóviles a medida que avanzaban por la ciudad.
“Este absurdo intento de imponer su voluntad por la fuerza no prevalecerá”, dijo el ministro de Justicia, Flavio Dino, en su cuenta de Twitter. “El gobierno del Distrito Federal ha asegurado que habrá refuerzos. Y las fuerzas a nuestra disposición están trabajando”.
lo que estamos viendo es un pueblo defendiendo los derechos electorales que claramente y ademas confirmado fueron robados. Antes d hablar debemos investigar y no juzgar a la ligera cuando un pueblo no quiere manchar su bandera de Rojo y hasta Amazonas salio a defender su voto que fue robado. Los ministros de Lula y demas politicos corruptos huyendo para no dar la cara al pueblo. Claro es mejor opacar la voz del pueblo para asi poder tomar sus posesiones para los paises hermanos comunistas y seguir pagando el pueblo brasileño. No es justo por eso nonse han quedado callado porque estan cansado. Como dice Bolsonaro, primero Dios y despues Brasil