El joven cubano Eduardo Sotomayor, quien se quitó la vida el pasado 9 de octubre en la ciudad estadounidense de Austin, Texas, pudo ser enterrado la pasada semana en su natal provincia de Santiago de Cuba.
“Gracias a la solidaridad de muchas personas el pasado 4 de diciembre Eduardo finalmente pudo ser despedido por sus seres queridos y recibió cristiana sepultura”, informó en redes sociales el activista Niover Licea, a quien la familia del muchacho transmitió su “eterno agradecimiento a todos los que hicieron posible este acto de amor en medio de uno de los momentos más difíciles de sus vidas”.
Saimi, la hermana de Sotomayor, oriundo de Palmarito de Cauto, en el municipio de Mella, se comunicó con Licea tras la trágica pérdida para pedir ayudar para difundir el caso, con el único propósito de poder darle un último adiós en su tierra.
“Dejó atrás a su hermosa hija pequeña, quien era su mayor orgullo y razón de vivir. También deja a sus padres, que están profundamente afectados por esta pérdida y desean poder darle un descanso digno y una despedida llena de amor”, señaló entonces una campaña de GoFundMe abierta para “cubrir los gastos funerarios y de despedida”.
“Con el corazón destrozado y un dolor que las palabras no pueden describir, nuestra familia lamenta la partida de Eduardo Sotomayor, un ser querido que se fue demasiado pronto, dejando un vacío imposible de llenar”, añadió la misma publicación.
“Eduardo fue un hombre noble, alegre y lleno de amor. Su sonrisa iluminaba cualquier lugar, y su bondad tocó la vida de todos los que lo conocieron. Hoy su ausencia deja un inmenso dolor y una herida que no cerrará jamás”, destacó la campaña.
“Se quitó la vida”, confirmó tajante en Facebook Celene Sotomayor Quevedo, prima de la víctima. “Es triste ver que un ser querido se nos vaya de esa manera. Dios te acogerá en su regazo. Descansa en paz, primo querido”, apuntó la mujer.
