La cantante cubana Dianelys Alfonso Cartaya (La Diosa) volvió a colocarse en el centro de la conversación digital con un directo en el que abordó —sin rodeos y con su sello frontal— su relación actual con Pollito Tropical, creador de contenido con quien arrastraba tensiones desde la sonada guerra de los perfumes.
Todo comenzó cuando, en plena transmisión, una seguidora le consultó si pensaba apoyar económicamente al influencer, hoy concursante de La Casa de Alofoke 2, reality dominicano donde las donaciones del público pesan en la permanencia de los participantes.
La respuesta fue inmediata y lapidaria: “No, no le mandé un peso a Pollito. Porque Pollito, antes de entrar a Alofoke, me atacó a mí por gusto. Yo lo hubiera apoyado, porque soy de las pocas artistas que siempre está apoyando a la gente. Pero tienes mala memoria, me atacó a mí”.
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Lejos de dejar el tema ahí, La Diosa dejó claro que no habrá reencuentros ni gestos de cortesía después de lo ocurrido: “No voy a ir a ponerle 500 dólares, no. Los 500 dólares son pa’ mis hijos. Yo lo que no soy es hipócrita”. Con esa frase, sepultó cualquier especulación sobre un apoyo público al youtuber.
El desencuentro entre ambos se remonta al cierre de 2024, cuando Pollito Tropical acusó a la intérprete de haber anunciado su fragancia justo después de enviar invitaciones privadas para el lanzamiento de la suya. Aquel episodio —reflotado por el propio influencer poco antes de entrar al reality— reavivó el malestar.
La artista, por su parte, insiste en que no hubo mala fe ni cálculo, y que su proyecto perfumero corrió por carril propio. Hoy, mirando atrás, volvió a despacharse: “Estamos en Estados Unidos, todos podemos sacar perfumes. Qué mierda de actitud y asquerosa de Pollito. Yo mantuve una amistad lindísima con él, fui a su podcast, pero luego me tiró por el piso solo porque saqué una fragancia”.
El directo no se limitó a Pollito. También hubo preguntas sobre sus vínculos con Ultrack y Claudia Artiles, amistades que hasta hace poco eran muy visibles en redes. Primero, La Diosa intentó esquivar con humor: “Mira, mejor hablemos de mi pelo. ¿No te gustó mi peluca nueva?”. Pero, segundos después, adoptó un tono más sobrio: “La vida es así, en la vida existen cambios. Y no es por nada, es así, sucede”. Un guiño claro a que esa cercanía estaría, como mínimo, en pausa.
Con su estilo directo y sin filtro, La Diosa volvió a marcar agenda: cerró la puerta a un gesto económico hacia Pollito Tropical, reivindicó su prioridad familiar y dejó asentado que, en su ecuación, coherencia y lealtad pesan más que cualquier estrategia viral.
