En Cuba pasan cosas que parecen escritas por un guionista con resaca. En medio de una de las crisis alimentarias más profundas de su historia, el país comunista ha decidido, por primera vez desde 1959, alquilar tierra agrícola a una empresa extranjera. Y no cualquier empresa: es vietnamita. Algo impensable o increíble años atrás; pero lo que la hace absolutamente inconcebible, ahora, no es precisamente eso.
Mientras tanto, en otra esquina de la isla, los datos oficiales reconocen que el sector privado ya supera al estatal en ventas minoristas. ¡¿Quién lo iba a decir!? ¿Verdad? Lo privado… Ese rezago burgués que fue borrado y exterminado de la geografía cubana.
Y por si fuera poco, un video viral de una pareja de cubanos emigrados a Estados Unidos nos recuerda por qué todo esto es urgente. Porque en Cuba, conseguir mantequilla puede tardar seis meses. Literal. O más. ¿Lo duda?
Eso sí, esas tres cosas, son apenas parte del problema.
1. Tierra para los vietnamitas: arroz de exportación… en suelo cubano
Los Palacios, Pinar del Río. En los campos de arroz de esta zona, donde alguna vez el Estado prometió soberanía alimentaria, hoy cosechan obreros contratados por Agri VMA, una empresa privada de Vietnam. El acuerdo, inédito desde la revolución de Fidel Castro, permite a esta compañía usar 1.000 hectáreas de tierra estatal bajo régimen de usufructo, importar sus propios fertilizantes, semillas y maquinaria, y vender el arroz al Estado cubano, sin intermediarios.
El primer ciclo agrícola fue un éxito. Según informó Deutsche Welle, los rendimientos alcanzaron 6,75 toneladas por hectárea, casi cuatro veces más que el promedio nacional de 2024.
“Nos falta todo: fertilizantes, pesticidas, semillas. Ellos lo trajeron todo”, admitió Ariel García Pérez, director de la Empresa Agroindustrial de Granos Los Palacios.
El arroz no se exporta. Se queda en Cuba. Pero el Estado ahora lo compra a una empresa extranjera. Importamos, pero en casa. Es el mismo arroz, solo que con mejor semilla y menos ideología.
Y hasta aquí todo bien, dirá alguien. El problema ha surgido ahora: El estado cubano no le deja sacar el dinero ganado a los vietnamitas de sus cuentas bancarias al exterior, según ha señalado el medio independiente 14ymedio.
Habrá, pienso, pensemos, algún problema con el dinero a nivel nacional porque, según se ha dado a conocer hace apenas algunos minutos, y esta es una noticia que está en desarrollo, el régimen ha paralizado todas las transacciones financieras mediante las plataformas eléctrónicas en el país.
3. El money es mío (por 29 horas que pueden ser 48) O más incluso
En medio de una creciente tensión social por los apagones, la escasez de agua y la precariedad económica, Cuba amaneció este miércoles con todos sus servicios de pago electrónico paralizados por 29 horas, una decisión anunciada por la estatal REDSA como parte de un “mantenimiento esencial previamente programado”. La medida afecta desde las 12 a.m. del miércoles 30 de julio hasta las 5 a.m. del jueves 31, e implica la suspensión total de operaciones en cajeros automáticos, la plataforma EnZona, los terminales de punto de venta (TPV) y las transferencias vía Transfermóvil, lo que dejó a millones de ciudadanos sin acceso a transacciones bancarias básicas.
La decisión ha generado una ola de críticas en redes sociales, donde muchos la comparan con el apagón digital previo al aumento de tarifas de ETECSA en mayo. Otros especulan sobre una posible maniobra para preparar el terreno hacia una inminente reestructuración del mercado cambiario.
En cualquier caso, la interrupción del sistema financiero electrónico llega en un momento crítico, agravado por una nueva avería en la termoeléctrica “Antonio Guiteras” y la caída progresiva de los servicios básicos, según recoge el medio Café Fuerte.
3. Sí, la Guiteras volvió a romperse
Esta noticia ya no asombra a nadie. La central termoeléctrica Antonio Guiteras, la más importante de Cuba, sufrió una nueva avería en su caldera, lo que obligó a sacarla del Sistema Eléctrico Nacional por al menos 96 horas. La falla, que se produjo justo después de que la Unión Eléctrica (UNE) anunciara un déficit de 1.992 megavatios para la hora pico, vuelve a desequilibrar todo el sistema, en el que otras plantas, como Energas Varadero y Santa Cruz del Norte, también están parcialmente fuera de servicio. Las “incidencias” afectan a otras unidades en Santiago de Cuba, Holguín, Mayabeque y Cienfuegos, dejando inutilizados más de 400 MW de generación térmica.
Pero el principal problema sigue siendo el mismo: no hay combustible. Los parques solares apenas alivian durante unas horas el colapso. Y aunque llegó recientemente al puerto de La Habana un buque mexicano con 13.000 toneladas de crudo, nadie sabe cómo se está pagando ese combustible ni si será suficiente. El ministro de Energía, Vicente de la O Levy, admitió en la Asamblea Nacional que los planes de generación “no se han cumplido” y que el petróleo venezolano y mexicano está llegando a cuentagotas. A estas alturas, ni siquiera el gobierno puede maquillar el desastre: los apagones han vuelto a su peor nivel en lo que va de verano, y el malestar crece con cada día sin luz.
4. El sector privado supera al estatal (¡y en Cuba lo reconocen!)
Mientras tanto, el sector privado en Cuba ahora representa el 55% de las ventas minoristas, según cifras publicadas por la Oficina Nacional de Estadísticas y recogidas por Reuters. Es la primera vez en más de seis décadas que los negocios no estatales superan a los estatales en este rubro.
En ferias informales como la del Puente 100 en La Habana, la gente ya ni se molesta en buscar productos en las tiendas del gobierno. “Aquí encuentras de todo, aunque sea caro”, dice Diamela García, vendedora de ropa. El economista cubano Omar Everleny lo explica así: “El Estado no tiene divisas para importar, el sector privado sí”.
Importan más los que antes eran considerados “enemigos del pueblo”. En 2024, las importaciones privadas superaron los 1.000 millones de dólares, un aumento del 34%. Mientras el gobierno habla de «guiar» al sector privado, los cubanos simplemente lo prefieren.
5. “Mi madre murió por café”: el testimonio que te parte en dos
En una entrevista con Fox News Digital, Yoel y Marissa Díaz, una pareja cubana radicada en Estados Unidos, se volvieron virales al hablar sobre lo que más los impacta en su nueva vida: la abundancia. “En Cuba me tomó seis meses encontrar mantequilla”, dice Marissa. “Allá hay grupos de WhatsApp donde se avisa dónde apareció la leche”.
Yoel, por su parte, lanza una frase que duele: “Mi madre murió por café, y tú aquí puedes salir a la calle y tomarte el que quieras”.
6. Cierra Cayo Cruz por ruptura en conductora de agua
Una rotura en la línea principal de abasto de agua potable obligó al cierre temporal de todos los hoteles del polo turístico de Cayo Cruz, en Camagüey, según confirmaron fuentes de varias instalaciones a 14ymedio. La mayoría de los turistas, en su mayoría canadienses, fueron trasladados a otros hoteles de la cayería norte, incluyendo Cayo Coco y Cayo Guillermo. El incidente ha generado incertidumbre entre quienes tienen reservas en los próximos días, mientras que representantes de cadenas como Iberostar y trabajadores del hotel Sanctuary White Sands intentan tranquilizar a los clientes asegurando que “se trabaja día y noche” para solucionar la situación.
El cierre golpea duramente a los empleados, quienes aseguran que ya se venían racionando los suministros desde hace semanas. A esto se suma el silencio de medios oficiales y del Ministerio de Turismo, lo que ha incrementado las dudas sobre la capacidad real de respuesta. La avería también desinfla las aspiraciones del Gobierno de reimpulsar a Cayo Cruz como uno de los “destinos de moda” en Cuba, una estrategia iniciada tras una visita de Fidel Castro en 1989 y apoyada por el conglomerado militar Gaesa a través de Gaviota. Pese a la belleza natural de la zona, los problemas estructurales, la escasez de recursos y la falta de información clara siguen deteriorando la imagen del turismo en la isla.
El contraste en todas estas noticias es demoledor. Mientras algunos celebran que ahora puedes alquilar tu finca a un vietnamita o importar tu mercancía como emprendedor, la mayoría sigue lidiando con el hambre, las colas y la humillación cotidiana de no tener acceso a lo básico. Para aderezar el cóctel, la Guiteras continúa rompiéndose y hasta el agua falta en los hoteles para el turismo.
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