Un cubano denunció este lunes las condiciones y los ingredientes con que se elabora el puré de tomaté en el municipio avileño de Florencia.
Según expuso a través de la página de Facebook La Tijera, quien trabajó “un día” en uno de los negocios locales dedicados a hacerlo, el puré está hecho con mango verde rayado, calabaza, un “ácido repugnante” y, como colorante, un “polvo de pulir pisos”.
“Están utilizando de todo menos tomate para su elaboración”, contó la misma fuente, quien catalogó como “lastimoso” el “ver en las condiciones en que lo elaboran”.
“No tienen compasión ninguna con los consumidores”, añadió en una crítica dirigida tanto a los fabricantes como a los vendedores del producto.
“Las latas y los pomos plásticos que usan para envases son recogidos de los basureros. Los llenan y los sellan con etiquetas hechas en una imprenta, como si fueran de fábrica”, añadió el denunciante.
Por otro lado, la misma persona aclaró que “los inspectores de Salud y de Comercio saben de esta situación”, pero “recogen” dinero para “comprar su silencio y su complicidad”.
Una fotografía de las expuestas por La Tijera muestra una lata de una “pasta de tomate” llamada Yumato, cuyo valor es de 480 pesos.
A juzgar por muchos de los comentarios que despertó esta denuncia, parece tratarse de una realidad extendida mucho más allá de los límites de Florencia.
Según apuntó la usuaria Mayra Ramos, el mencionado puré lo hay en mipymes en La Habana y “hay muchas quejas” de él. “No da color. Es color refresco de melón y, ahora me doy cuenta, me da diarrea y dolor de estómago cuando hago picadillo o espagueti con ese puré”, expresó.
“Yo tenía un vecino que el puré de ají que vendía en botellas era 90% calabaza. Era una montaña de calabazas en el patio”, apuntó otro internauta.
Sobre la misma cuerda, la cubana Irma Batista se asombró de que “todavía la gente caiga en eso”. “Hace rato que en mi casa se compra tomate y se hace y cuando no hay, punto con bijol. Sabrá Dios lo que le tiran ahí”, dijo quien prefiere cocinar sin puré que hacerlo con uno de dudosa procedencia.
“Qué triste realidad. Nos estamos matando entre cubanos”; “No es de extrañar, pues la falta de control e higiene es abismal” y “Una intoxicación por alimentos puede matar a una persona”, opinaron otros.
