Uno de los últimos episodios de La Familia Cubana contó con la participación de dos grandes y queridos actores que han dejado huella en la televisión cubana: Bárbaro Marín y Néstor Jiménez.
Ambos han compartido pantalla en numerosas producciones icónicas de la isla, como la serie Las Huérfanas de la Obrapía o la aclamada película Zafiros, locura azul (1997).
Además de hablar sobre su extensa trayectoria, los actores recordaron momentos personales que ocurrieron fuera de las cámaras, entre ellos, un episodio poco conocido sobre la expulsión de Jiménez del popular programa Para bailar.
Este show televisivo marcó a toda una generación y fue la plataforma de varios rostros emblemáticos de la televisión cubana, como Alberto Pujol, Carlos Otero, Lily Rentería, Mara Roque y Vicky Rodríguez. Sin embargo, lo que quizás pocos conocían es el motivo por el cual Jiménez fue apartado del programa en aquel entonces.
Durante la entrevista, al responder la pregunta “¿Cuál es el rumor más loco que has escuchado sobre ti?”, el actor sorprendió con su respuesta: “Que yo, de adolescente, me quería robar una avioneta y que por eso me botaron de Para bailar”.
Según contó, la acusación también incluía haber intentado cortar cables de teléfono y dañar asientos de cine, lo que, en su momento, se consideró una mancha para la “integridad” del programa.
«A mí me botaron por eso, porque llegó un informe a la televisión, y me botaron porque supuestamente nosotros deberíamos ser ejemplo para la juventud. Y después de todo ese hándicap con ese expediente, me botaron», confesó Jiménez.
El actor recordó lo duro que fue enfrentar esa situación con apenas 20 años, especialmente porque se trataba de hechos que supuestamente habían ocurrido cuando tenía solo 12 o 13 años.
«Me costó muy caro. Imagínate con esa edad, que de pronto tú te sientes frente un presidente que había en la televisión y que te diga: ‘no usted no puede seguir trabajando en la Televisión Cubana porque mira lo que llegó aquí’», relató.
Más allá de lo personal, el actor de 62 años habló del impacto que esta acusación tuvo en su familia y con otra verdad que de momento no quiere revelar, en especial en su hermana, quien al parecer sufrió dos derrames cerebrales a raíz de la situación.
«Justamente tenía que ver cuándo hablaba de aquella acusación que me hicieron, hay una verdad ahí del gran daño que se le hizo a mi familia que la gente no tiene cálculo de eso», expresó con pesar.
El actor aseguró que no tiene miedo de contar la historia, pero que lo más doloroso es el sufrimiento que este tipo de injusticias pueden generar en los seres queridos.
«El hecho de que alguien tan cercano y tan querido a uno le ocurran esas cosas y todo por cosas totalmente ajenas, provocadas por circunstancias y situaciones que ha ocurrido. Tengo esas dos verdades muy adentro» , concluyó Jiménez.





