Un hombre británico, de 70 años edad, murió dentro de un salón de masajes en Tailandia, y dice la policía que todo fue por culpa del llamado «happy ending».
Para los pecatos y desconocecedores… el happy ending, o «final feliz» ocurre cuando la «masajista» termina su masaje al cliente con una masturbación.
Todo ocurrió en la ciudad tailandesa de Pattaya, al cual el medio Daily Mail llama «ciudad del pecado».
John Swain, de 70 años, entró a un salón de masajes identificado como Lovely Massage y lo pidió «todo». Según la policía, su experiencia terminó después de «dormirse y asfixiarse».
El personal de la tienda trató de reanimarlo, pero como vieron que no despertaba imaginaron lo peor y procedieron a cubrir su cuerpo con una toalla.
La policía llegó a la tienda Lovely Massage en Bang Lamung, y confirmó que sí, que el hombre estaba muerto, dice por su parte Newsflare.
En un inicio sospecharon de «Miss Oraya», la masajista de 39 años. Buscaron indicios de estrangulamiento o envenenamiento pero nada. Tras las investigaciones de rigor, los testigos coincidieron en sus declaraciones. Swain llegó, se quitó la ropa y «Miss Oraya» comenzó a darle el masaje solicitado antes de culminar con el «happy ending».
Swain fue declarado muerto en la escena, y su cuerpo fue trasladado a un hospital para confirmar la causa de la muerte mediante autopsia.
La mujer, como toda una profesional dijo a los periodistas:
«Todo iba normalmente y luego noté que estaba durmiendo. De repente, comenzó a tener dificultades para respirar. Estaba jadeando y ahogándose. Llamé a las otras chicas para pedir ayuda y comenzamos a bombear su corazón».
Miss Oraya no dijo si dentro de ese «normalmente» al que ella se refirió estaba o no incluido el happy ending. Es decir, si murió en el proceso del happy ending o como parte de los masajes previos.
Señala el Dayli Mail que la ciudad donde ocurrieron los hechos, Pattaya, «ha luchado en los últimos años para limpiar su imagen como la ‘ciudad del pecado’ de Tailandia.»
La «lucha» lleva años, pero Pataya se sigue promoviendo como destino para el turismo sexual.
Allí llegó Swain, buscando relajarse al máximo, con Happy Ending incluido y ciertamente encontró su «ending» y presuntamente en búsqueda de la «happiness».
Tal vez quieras leer esta noticia de hoy, 31 de enero 2022:
