Un artículo publicado en el diario oficialista Granma, que critica la negación de las visas a funcionarios y ex deportistas cubanos, señala que la verdadera razón de esa medida es que «Estados Unidos teme a los triunfos de Cuba».
«Por qué Estados Unidos hace esto? Sencillamente porque le teme al ejemplo de un pequeño país que no se le ha subordinado, y que sí paga un precio alto por eso; pero es de los pocos que va con la cabeza en alto y con el pecho rebosante de dignidad. Estados Unidos teme a los triunfos de Cuba, en el deporte, y en cualquier esfera, por mucho que hace para impedirlo», señala el texto firmado por el reportero Oscar Sánchez
Sánchez señala que «el pasado 5 de mayo, María Caridad Colón no asistió a la sesión de la Comisión Mujer en el Deporte de Panam Sports, porque no obtuvo la visa para viajar a ese país. Se trata no solo de la primera campeona olímpica de América Latina, ella es miembro del Comité Olímpico Internacional y vicepresidenta del cubano (COC). Del 13 al 15 de este mismo mes, Roberto León Richard y Ruperto Herrera, presidente y secretario general del COC, respectivamente, debieron estar en la reunión del Comité Ejecutivo de Panam Sports, y unos días después en el Foro de Solidaridad Olímpica para los Comités Olímpicos Nacionales de las Américas. Pero no ocurrió, porque las sedes eran Miami y Puerto Rico, y nuevamente Estados Unidos se negó a recibir a Cuba»,
El escribidor explica que «en marzo pasado, del 23 al 30, Gainesville, en la Florida, acogió el Campeonato Mundial de Atletismo Máster Bajo Techo, y 14 competidores cubanos fueron rechazados, al no recibir sus visados. Lo mismo ocurrió, en este 2025, con el equipo masculino de baloncesto, que no llegó a Puerto Rico, para el certamen clasificatorio de la Copa América. Son solo ejemplos de este año, pero la lista es casi infinita».
Sin embargo no queda claro a qué triunfos se refiere cuando el deporte, como la sociedad cubana toda, está en desbandada. En las competencias internacionales más recientes las actuaciones de Cuba distan del éxito que un día tuvo y el descalabro en legendarios deportes colectivos como la pelota da vergüenza, por no mencionar los cientos de deportistas cubanos que juegan bajo otras banderas y ocupan los primeros lugares en sus respectivas disciplinas.
Uno de los casos más emblemáticos es el de los saltadores cubanos Pedro Pablo Pichardo, quien compite por Portugal, y Jordán Díaz, quien lo hace por España. Ambas se disputan los primeros lugares en ese deporte tras migrar de Cuba, con resultados impresionantes en las pistas. Otra de las sangrías que ocurren es en el béisbol que durante los últimos tiempos se ha quedado sin varias de sus principales figuras que actualmente triunfan en Grandes Ligas con contratos millonarios.
Habría que preguntarle a Granma a qué se refiere específicamente en este articulo pero lo que sí se sabe es que el «órgano oficial» como el discurso del gobierno sigue viviendo de la historia, del pasado, mientras el deporte y la sociedad cubana se desangra entre otras cosas por la imparable crisis migratoria.





