Esta semana, los titulares estuvieron dominados por el arresto del actor y galán cubano William Levy, tras verse involucrado en un altercado en el restaurante Baires Grill que requirió la intervención de la policía.
Todo indica que este incidente ha tenido repercusiones negativas en su entorno más cercano, entre ellos la actriz y modelo estadounidense de ascendencia mexicana Elizabeth Gutiérrez, expareja de Levy.
A través de un comunicado publicado en su perfil de Instagram, en conjunto con su firma de abogados, la actriz expresó su decisión de salvaguardar sus derechos fundamentales, los cuales —según indicó— han sido vulnerados de manera reiterada mediante la difusión de información “imprecisa, falsa y tendenciosa”, atentando contra su vida personal y privada.
En la publicación se hacía referencia a cómo, en la actualidad, cualquier persona con acceso a un dispositivo tecnológico puede asumirse como “reportero”. Sin embargo, aclaraba que ni la libertad de expresión ni el ejercicio periodístico amparan actos como “calumniar, difamar o agredir la dignidad de una persona”.
“Los derechos a la intimidad, la vida privada, el honor, la reputación, el prestigio y la propia imagen no se negocian”, afirmaba el comunicado, emitido en un momento especialmente delicado para Gutiérrez, mientras su expareja y padre de sus hijos enfrenta problemas legales.
Aunque el comunicado no menciona directamente el escándalo de William Levy, todo parece indicar que la presión mediática sobre la vida personal de Elizabeth ha llegado a un punto crítico.
La defensa de Gutiérrez acusa a ciertos comunicadores de actuar con un “sesgo personal, subjetivo y reiteradamente misógino, sino que están claramente diseñados para incitar al odio, denigrar sus logros y violentar su dignidad”, y advierte que cualquier nuevo intento de abuso o intromisión será respondido con acciones legales firmes.
“Por lo anterior, hemos sido instruidos para actuar en consecuencia e impedir, de manera inmediata y definitiva, que sigan ocurriendo estas situaciones, ya provengan del (los) individuo(s) identificado(s), o de cualquier otro que abuse de un medio de comunicación, cualquiera que sea su formato, plataforma o empresa”, concluye el comunicado.
