Con un padre tan apasionado por los autos, Blu Jerusalema no tardaría en tener el suyo propio. ¡Acaban de obsequiarle un mini Range Rover!
Blu Jerusalema, la pequeña de Gianluca Vacchi y Sharon Fonseca apenas ha llegado al año de vida y ya se estrena un auto de lujo, un mini Range Rover.
Sus famosos padres han obsequiado a la simpática niña un coche en miniatura, el cual ya la niña domina como si hubiera nacido con una licencia de conducir bajo el brazo.
El millonario italiano ha subido a su cuenta de Instagram un video donde se ve a Blu hacer entrada, manejando el medio de transporte ella sola. Pero lo más llamativo de la publicación es que el auto está a juego con el de sus papás, negro y de terciopelo.
Vacchi es un apasionado por los automóviles y, tras regalar dos impresionantes vehículos a su novia, ha decidido que su hija también tenga el suyo propio.
En estos momentos, el video de la niña dando su demostración de manejo, junto a los coches de su mami y papi, es la publicación más popular de las redes sociales de la pareja.
Cierto es que, la familia que conforman el magnate italiano y la modelo venezolana no solo destaca por el amor que le expresan a su retoño constantemente, sino por la vida de lujos y excentricidades que tienen desde Bologna, en Italia.
Hace algunos días también acapararon la atención de los medios y las redes sociales por la espectacular fiesta de cumpleaños que organizaron para Blu, quien cumplió su primer añito.
La temática de la velada se centró en un pueblo mágico, donde la niña y los invitados disfrutaron como nunca entre globos, juegos inflables, pizza y todo un mundo de fantasía.
«Llegaste a nuestra vida como un ángel y cambiaste la perspectiva de todo mi mundo. Ahora sé por qué te esperé tanto. Las obras maestras vienen solo después de un largo camino y las esperas tanto porque son únicas y tienen un gran impacto en tu vida. Te amo mi princesa, nada es como antes y vivo por cada aliento tuyo», escribió Gianluca en su Instagram como parte de su dedicatoria a Blu.
Mientras Sharon tampoco se quedó atrás: «Viniste al mundo a darnos luz, llenar nuestras almas con el amor más puro que pueda existir y enseñarnos la más maravillosa, vulnerable y especial aventura… Me has enseñado en un año, lo que una vida entera no me alcanza. Te amamos por siempre y para siempre».
