El soldado ucraniano Juan Alberto Leyva Gavsiya, de padre cubano, fue incluido por Rusia en el último intercambio de prisioneros de guerra.
La liberación del militar, de 27 años, fue informada a CNN este jueves por su progenitor, Eloy Leyva García, un emigrante cubano establecido en Ucrania desde 1984 donde contrajo matrimonio con una ucraniana con quien tuvo dos hijos.
Ya hacía más de tres años que García no veía a su hijo capturado apenas a tres meses de iniciarse la invasión de Rusia en febrero de 2022. El joven fue incluido en un grupo de 84 personas liberadas por Rusia entre los que se encontraban 33 militares y 51 civiles de acuerdo a un comunicado de las autoridades de Kiev.
De acuerdo a CNN Juan Alberto estuvo entre los últimos soldados capturados por los rusos tras un cerco a una planta de acero en Mariupol, su ciudad natal en mayo de 2022. El joven había dejado sus estudios de Arquitectura en 2018 para alistarse en el ejército para defender a su país cuando ya transcurría el cuarto año de la ocupación rusa de Crimea. En 2021 renovó su contrato para continuar en las fuerzas armadas
Según el reporte, en la planta metalúrgica al sur del país, asediada por varias semanas, unos 2000 soldados ucranianos se habían quedado sin municiones, hambrientos y sedientos. Sólo tenían dos duras opciones: rendirse o morir. Juan Alberto fue uno de los últimos en salir del lugar sitiado.
«Yo respiré profundo porque sabía que la otra opción sería la muerte» declaró el padre en una entrevista en julio último con CNN. Según un testigo, unos 400 militares ucranianos murieron en la acción.
«Juan Alberto es un orgullo para nosotros. Es un patriota de Ucrania, sin ningún tipo de compromiso con el enemigo» dijo Eloy Leyva García acompañado de su hija Lyudmyla y su esposa Larissa. La familia habló por primera vez en exclusiva el mes pasado, cuando aún el joven estaba en cautiverio, para denunciar lo que ellos consideran serias violaciones a las normas internacionales sobre el trato a prisioneros de guerra por parte de Rusia.
En ese momento lo más importante para ellos es que sabían que su hijo estaba con vida de acuerdo a testimonios de otros prisioneros de guerra que habían sido intercambiados y que contaron también sobre los maltratos de los rusos. Moscú, por su parte, rechaza transgresiones del derecho internacional en virtud de la Convención de Ginebra que establece que los prisioneros de guerra deben ser tratados con humanidad.
«Queremos sobrevivir, salvar a nuestra gente y continuar la lucha por nuestro país» fueron palabras de Juan Alberto en su último mensaje antes de caer prisionero, escuchadas en el reporte de CNN.
