Ante la denuncia masiva contra el monopolio de las comunicaciones ETECSA muchos cubanos pensaron que la compañía daría un paso atrás y rebajaría las nuevas tarifas, pero a día de hoy no hay señales de que tal cosa suceda.
El «tarifazo» ha sido repudiado por diversos sectores de la sociedad cubana, entre ellos varias figuras oficialistas, mientras la empresa solo ha acudido a argumentos poco creíbles para justificar semejante medida, que deja a una buena parte de la población cubana sin acceso sistemático a Internet.
Lo más llamativo del caso es que desde organizaciones del oficialismo como la Federación de Estudiantes Universitarios y la Asociación Hermanos Saíz ha sido criticada dicha resolución lo que ha hecho pensar a algunos en que ha sido una estrategia del gobierno para desviar la atención sobre otros asuntos acuciantes como los prolongados apagones o para demostrar en un presunto ejercicio de democracia que escucha al pueblo y bajar finalmente el precio aplicado en el » tarifazo».
Incluso el propio mandatario Miguel-Díaz Canel dijo que ese estaban escuchando las opiniones del pueblo y que se tomarían medidas para proteger a los más «vulnerables».
«Hemos estado al tanto de la opiniones, críticas e insatisfacciones de nuestro pueblo con las medidas anunciadas por Etecsa, ante la urgencia de mantener y desarrollar un servicio imprescindible, hoy en situación compleja», dijo el gobernante.
Canel anunció inclusive que estará participando de un programa especial para abordar las medidas de Etecsa. Por otro lado presidenta ejecutiva de Etecsa, Tania Velázquez Rodríguez, dijo que el «tarifazo» también está diseñado para la comunidad cubana en el exterior en unas declaraciones altamente criticadas por los usuarios en la isla. «Existe un mercado fuera de Cuba que quiere comunicarse con sus familiares” y que las nuevas ofertas están enfocadas también en ese grupo de clientes», indicó.
La compañía ha señalado que la aplicación de estas medidas se debe en un gran por ciento a las deudas que ha contraído y a la necesidad de recaudar «moneda fuerte», para pagarlas.
En medio de todas esas declaraciones no ha habido una señal de una posible rectificación que devuelva al cubano común y corriente, sin acceso a recargas internacionales, la posibilidad de acceder a la red de manera más sistemática y aprovechar en mayor medida de los beneficios de la tecnología.
Sin embargo no es descartable que esta historia tome un nuevo giro y cambien los precios del «tarifazo» para que el gobierno quede como el «policía bueno» y Etecsa como el célebre malo.





