Un hombre de 60 años, identificado como Lázaro Calzadilla, murió tras un incendio provocado por la explosión de una motorina en La Habana Vieja en la noche del pasado miércoles.
Según contaron algunos testigos en redes sociales, el siniestro avanzó rápidamente por la casa enrejada, ubicada en el número 59 de la calle Picota, entre Jesús María y Acosta.
De acuerdo con las imágenes compartidas en Facebook por una vecina, Dulce Enríquez, la casa del sacerdote de la Regla de Ocha, mejor conocido como babalawo, quedó consumida por el fuego.
Además del mobiliario carbonizado y las paredes manchadas por el humo, el incendio hizo que de la moto eléctrica solo quedara una parte del chasis.
Muchos internautas, algunos de ellos también practicantes de la religión yoruba, lamentaron el fallecimiento de Calzadilla.
“Eso es en la entrada del pasillo de mi tía. Pobre Lázaro, Dios mío”; “EPD, Lázaro Calzadilla, padrino de mi hija” y “Qué dolor. Es el padrino de mi hijo. Descansa en paz. Dios te ponga en un lugar donde siempre tengas luz”, expresaron.
Es importante resaltar que el incendio de motos eléctricas, cada vez más usadas en la isla ante la escasez de medios de transporte público, ha sido cada vez más frecuente en los últimos años.
En agosto, por ejemplo, la explosión de una motorina en el municipio habanero de Diez de Octubre acabó con la vida de cuatro personas en el momento, entre ellos una bebé de un año, y dejó grave a una niña de 13 años, que falleció una semana después en el hospital.
Otro caso con múltiples víctimas ocurrió en Centro Habana, en junio de 2023, cuando murieron siete miembros de una misma familia, dos de ellos niños.
Desde 2019 hasta junio del año pasado se reportaron más de 3.000 incendios de motorinas en la isla, o lo que es lo mismo, 1,67 por día, informó Eleser Meneses Herrera, jefe del Cuerpo de Bomberos de Villa Clara.
“En el 80% de los siniestros se registran lesionados, pues las personas intentan sacar la motorina, autoevacuarse o poner a buen resguardo a sus familiares y bienes materiales”, declaró en septiembre pasado al periódico Vanguardia.
A tenor con Meneses, “el 90% de los incendios provocados por explosiones de motorinas ocurre de 12:00 am a 12:00 pm. Las cargamos durante la madrugada, nos levantamos apurados para entrar al centro de trabajo, nos montamos sin esperar que la batería descanse y ocurre la combustión”.
Entre las principales causas de estos incidentes están la sobreexplotación de las motorinas y el hecho de que “muchas personas conectan las baterías apenas llegan de la calle, sin permitirles el reposo adecuado”.
“Esto causa un aumento de la temperatura interna de las baterías y las daña gradualmente, lo que puede llevar a su explosión, incluso si no se están utilizando ni cargando en ese momento”, señaló el mayor Jelsy González Longo, especialista de la Dirección Nacional contra Incendios.
Además, en muchos casos, se modifican los llamados BMS (Battery Management System, en inglés) que no son más que Sistemas de Gestión de Baterías, dispositivos de seguridad que regulan la carga, las temperaturas y el balanceo de celdas.





