La prensa sudcoreana ha llamado la atención sobre la ausencia de evidencias de un contacto directo del gobernante norcoreano Kim Jong-un con su homólogo cubano Miguel Díaz-Canel durante las conmemoraciones por el aniversario 80 del Día de la Victoria de China, en un escenario donde Kim «interactuó con líderes de muchos países» en lo que pareció su «debut en la diplomacia multilateral».
Para Kim fue un momento histórico en medio de un aislamiento internacional que desde Seúl han dicho se agudizó cuando su histórico aliado del hemisferio occidental, Cuba, sorprendió al establecer relaciones diplomáticas con su «enemigo número uno», Corea del Sur, el 14 de febrero de 2024.
Esta fue la primera visita de Kim a China en seis años desde 2019. Anteriormente, estuvo cuatro veces, tres en marzo, mayo y junio de 2018, y una en enero de 2019. Por primera vez también protagoniza una reunión multilateral con los líderes de China y Rusia.
Pero ninguna mención a un encuentro de Canel con Kim en Beijing se encuentra en las reseñas de los enviados especiales de la prensa oficial cubana y al mismo tiempo tampoco se encuentra ninguna mención al dirigente cubano en el Rodong Sinmun (el Granma caribeño) ni en la agencia oficial KCNA, al menos hasta el dia de hoy.
«No hay ninguna circunstancia de que el presidente Kim haya tenido contacto alguno con los líderes de Cuba e Irán, amigos tradicionales de Corea del Norte, lo que lleva a especular que la relación entre estos países no es tan buena como antes» escribió la agencia Yonhap, desde Seúl.
Antes, durante y después del desfile militar, Kim apareció todo el tiempo junto a Xi Jinping y a Vladimir Putin. Previo al comienzo del gran espectáculo en la Plaza Tiananmen, se difundieron fotos de Kim estrechando la mano de numerosos líderes extranjeros invitados incluido el de Malasia. Las relaciones entre Malasia y Corea del Norte se deterioraron después del asesinato del medio hermano de Kim Jong-un, Kim Jong-nam, en el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur en Malasia en febrero de 2017. Malasia arrestó a norcoreanos en su país y los extraditó a Estados Unidos, lo que llevó a la ruptura de relaciones diplomáticas entre los dos países. Esta es la primera vez que los dos líderes se reúnen desde esa ruptura.
En otra foto se ve a Kim del brazo, sonriente, del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, rodeado de un grupo en el que de «refilón», en una esquina, se aprecia la figura del mandatario cubano. Según NK News, un medio de comunicación estadounidense centrado en el tema Corea del Norte, Kim también le pidió a Lukashenko que visitara Pyongyang. «Kim no tuvo mucha interacción con el presidente cubano» afirmó la publicación.
Diaz-Canel es el único jefe de Estado que asistió al evento del Día de la Victoria, con quien el presidente Kim había mantenido conversaciones bilaterales en el pasado, a excepción de Xi Jinping, y Vladimir Putin, advirtió Yonhap «pero se dice que la relación se está distanciando debido a la influencia del establecimiento de relaciones diplomáticas de Corea del Sur con Cuba».
LLama aún más la atención que no se haya revelado hasta ahora ningún contacto oficial entre los máximos representantes de ambos regímenes en el contexto incluso del aniversario 65 del establecimiento de las relaciones diplomáticas bajo el mandato de Fidel Castro y Kim Il-Sung. «Cuba jamás fallará en su solidaridad con la RPDC» tituló el Granma hace una semana, pero al parecer el «nuevo Kim» se hizo el de la vista gorda al tomar su tren blindado y privado desde Beijing de regreso a casa.
