Una mujer de 26 años y un adolescente de 16, ambos cubanos, murieron en un accidente ocurrido el pasado lunes 15 de diciembre en el municipio de Bonfim, al norte de Roraima, en Brasil, cuando intentaban ingresar de manera ilegal al país desde Guyana.
Otros siete cubanos, entre ellos dos niños de 3 y 8 años, resultaron heridos en el incidente que tuvo lugar cuando el vehículo en el que viajaban huyo de la Policía Federal de Carreteras (PRF).
Según la PRF, agentes que estaban realizando una inspección en la carretera BR-401 identificaron al auto accidentado huyendo a gran velocidad y realizando maniobras peligrosas para evitar ser detenido.
“Durante la acción, la Policía avistó un vehículo GM Prisma, con diez ocupantes, nueve cubanos y un brasileño, que se dirigía de Bonfim a Buena Vista. Al notar la presencia de los agentes, el conductor dio la vuelta y huyó a gran velocidad por la misma BR hacia Bonfim”, apuntó la autoridad en su sitio oficial sobre un hecho que “involucró a ciudadanos cubanos que intentaban entrar ilegalmente en Brasil”.
Luego de una persecución, “el conductor entró en un camino de tierra, donde perdió el control del coche”, y terminó volcándose.
Según reportó el medio Roraima, los cuerpos fueron retirados por el Instituto Médico Legal y los lesionados, rescatados y trasladados al hospital de Bonfim.
“Uno de los ocupantes informó a las PRF que cada cubano pagaría 500 dólares estadounidenses para entrar clandestinamente en suelo brasileño”, indicó la nota.
“A la luz de la información recopilada, se cometieron los siguientes delitos por el conductor del vehículo: promover, por cualquier medio, para obtener ventaja económica, la entrada ilegal de un extranjero en territorio nacional o de un brasileño en un país extranjero; homicidio involuntario al volante de un vehículo motorizado; y lesiones corporales mientras conduce un vehículo a motor calificadas”, añadió la PRF.


















