En la Isla de la Juventud no hace falta Netflix para engancharse a una buena novela. Basta con abrir un grupo de Facebook de compraventa para toparse con una historia que mezcla drama amoroso, humor involuntario y un toque de cemento. Literalmente.
El detonante fue una publicación de una joven identificada como Yenifer Ramírez Ávila en el grupo “Compra y venta en la Isla de la Juventud. Y aunque un comentarista asegura que la joven tiene varios perfiles falsos, lo dicho no pasó desapercibido.
Parece ser que ella encontró un post escrito por otro chico, o conoce alguna historia con relación a otro chico, que está separado pero actualmente sigue enamorado de su ex. Y sin rodeos, y en medio de un hilo donde opinaba sobre los problemas sentimentales de otro usuario, soltó una de las frases más comentadas del año:
“Niño, ni te conozco, pero si tu mujer te dejó deja el ataque de tarro. A mí tú me llamas la atención. Si quieres, no podemos conocernos; solo te digo que los maridos que yo me busco tienen que ayudarme en todo y, en este momento, estoy en construcción. Pero no te asustes”.
El post, mezcla de declaración directa y anuncio clasificado con requisitos, hizo estallar los comentarios. Algunos se preguntaban si la autora buscaba pareja, albañil o inversionista. Otros aplaudieron su franqueza: “Más clara no puedes ser”, le escribieron. La frase “estoy en construcción” se convirtió en el nuevo meme local, con referencias al precio del cemento, la escasez de bloques y bromas sobre que “Bob el Constructor” sería el candidato ideal.
La publicación, en pocas horas, acumuló decenas de respuestas. Los internautas entraron en modo telenovela: “Queremos segunda parte”, “¿El muchacho aceptó?”, “No lo asustes, mujer”. Algunos la acusaron de haber espantado al posible pretendiente con tanta sinceridad, mientras otros defendieron que mejor así, sin “palabritas lindas” que después resultan ser mentira.
Hubo también espacio para el humor ácido. Un usuario comentó que “los maridos que ella se busca tienen más kilómetros que el catamarán de Batabanó” y alguien más preguntó “qué están dando por la bodega” para que la gente estuviera tan alborotada en la Isla. Entre risas y pullas, incluso aparecieron ofertas ficticias de “paquetes de café y cajas de cigarros” para quien publique la segunda parte de la historia.
Un post muy parecido al del mipymero que busca pareja. ¿Se acuerdan? Bueno, tal vez lo que tiene que hacer esta chica, es empatarse con el mipymero que tiene un negoció de construcción y que está buscando su media naranja. Ni siquiera están lejos. Uno está en Pinar del Río; ella en la Isla de la Juventud. ¡Arriba! ¿Quién se muda?
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Lo cierto es que, más allá de las bromas, el episodio confirmó una vez más el poder de las redes en pueblos pequeños: una declaración inesperada puede convertirse en el tema de conversación de todo un territorio. Y, como todo buen culebrón, la gente ya no quiere que le cuenten… quiere verlo con sus propios ojos.
