Durante la entrevista con los representantes del Instituto Nacional de Migración de México los cuatro náufragos cubanos rescatados hace cuatro días manifestaron su deseo de acceder a su regularización migratoria y con ello, permanecer en el país, dijo la institución en un comunicado.
El 4 de mayo el INM conoció por parte de Protección Civil del municipio de San Fernando, Tamaulipas, sobre el rescate de cuatro personas originarias de Cuba, localizadas en la playa La Carbonera, después de salir de su país el 1 de abril.
«Las personas rescatadas, fueron trasladadas al Hospital General de San Fernando para su atención médica, a fin de atender los cuadros de deshidratación grave que presentaban. Este lunes, autoridades del hospital informaron al INM que se daría el alta a dos y dos más quedarían en observación.La autoridad migratoria se mantendrá atenta a la evolución de la salud de los ciudadanos cubanos que continúan en observación médica» precisó el comunicado.
Los cuatro cubanos hospitalizados tras naufragar durante 34 días, recibieron este lunes la visita del Cónsul de la embajada cubana en Monterrey, Fabio Álvarez. Posteriormente dos de ellos fueron tomados en custodia por el INM.
A su salida el cónsul Álvarez dijo que no estaba autorizado para dar entrevistas, pero que sus connacionales se encontraban bien de salud, según el medio El Mañana, de Tamaulipas
El diplomático sólo explicó que será decisión de los cubanos si tienen los deseos de regresar a su país, permanecer en México o continuar su viajo hacia otro país.
El personal del INM, con el apoyo de los elementos de la Guardia Nacional, resguardaron la zona de salida de ciudadanos que acuden a visitar a pacientes hospitalizados.
Por esa área salieron dos de los cuatro cubanos que se encontraban hospitalizados, se subieron rápidamente a la camioneta oficial del INM, por lo que se impidió a los medios de comunicación entrevistarlos, apuntó el medio local.
Los cuatro sobrevivientes fueron nombrados como Mario Sergio Márquez Ventura, de 30 años; Yuresqui Romero Hernández, de 33; Diosan Fuentes, de 26, y Rogelio Fuentes, de 35. Otros cuatro de sus compañeros, que no han sido identificados, perecieron durante el naufragio.
La precaria embarcación con los cuatro cubanos fue localizada a tres kilómetros mar adentro de la Barra Boca de Catán, que se localiza frente a los poblados Punta de Piedra y Carbajal, del municipio de San Fernando.
Pescadores ribereños, que salían de la zona lagunaria de San Fernando, para adentrarse en las aguas del Golfo de México a realizar la captura de distintas especies , observaron una embarcación que naufragaba y constataron que en su interior se encontraban cuatro personas que apenas pedían agua y alimento. Inmediatamente realizaron maniobras y transportaron a tierra firme, en dos botes a los sobrevivientes de las tormentas sufridas al tratar de cruzar el mar con destino a Estados Unidos.
