El creador de contenido cubano Ariel Ramos Perdomo, famoso por los divertidos videos que compartió junto a su “abuela” Martha, sorprendió recientemente a sus seguidores al hablar por primera vez sobre su orientación sexual. En una entrevista con “Esto no es un pódcast”, el joven declaró abiertamente que es gay y relató cómo fue su camino hacia la aceptación personal y familiar.
“Si eres gay y sientes que se te acaba el mundo, sé feliz tú primero. Olvídate de mamá y papá si no te apoyan”, expresó con firmeza, mirando a cámara y marcando uno de los momentos más emotivos de la conversación.
Ariel explicó que durante años ocultó su identidad por miedo al rechazo. Creció en un entorno donde los prejuicios hacia la homosexualidad aún pesaban, y esa carga lo llevó a reprimir lo que sentía. “Mi papá es un hombre conocido en el pueblo, respetado, un tipo que muchos consideran ‘macho’. Yo pensaba que sería el primero en rechazarme, pero fue quien me dio fuerzas”, recordó.
El abrazo y las palabras de su padre —“No me importa, tú eres mi hijo”— se convirtieron en un punto de inflexión. Perdomo confesó que aquella reacción lo conmovió profundamente, sobre todo porque no la esperaba de alguien a quien siempre vio como una figura rígida.
Su madre, Maribel, en cambio, tuvo un proceso más largo y doloroso. “Se lo tomó muy mal. Estuvo dos años sin mencionar el nombre de mi pareja”, contó. Sin embargo, el tiempo trajo comprensión. Hoy, madre e hijo mantienen una relación más cercana y ella incluso ha aprendido a convivir con la persona que acompaña a Ariel.
El influencer reconoció que su paso por la iglesia —donde permaneció cuatro años— fue uno de los mayores obstáculos para aceptarse. “En la iglesia no lo aceptaban, pero yo siempre tuve la mente abierta. Nunca tuve problema con los amigos gays; el problema era mío, no poder ser yo mismo”, reflexionó.
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Antes de reconocer públicamente su orientación, Ariel mantuvo una relación con una mujer mayor, una etapa que describe como confusa y marcada por el miedo a “defraudar a los demás”. Con el tiempo, la vida lo llevó a encontrar a su actual pareja y, sobre todo, a encontrarse a sí mismo.
“Hoy puedo hablar con libertad porque ya me acepté. Fue difícil, pero ahora soy feliz”, afirmó. Su testimonio, sincero y sin disfraces, ha conmovido a miles de seguidores, que le han dejado mensajes de admiración y apoyo.
