La diferencia clave radica en la premeditación y la intención deliberada presentes en el asesinato en primer grado, mientras que el asesinato en segundo grado se caracteriza por una conducta imprudente sin planificación previa, que es hasta el momento lo que parece ajustarse al caso de Damián Valdez Galloso, el presunto asesino de El Taiger.
A pesar de que cerca de 50,000 seguidores del intérprete cubano El Taiger han firmado una petición online en la plataforma Change.org exigiendo que el acusado sea procesado por asesinato en primer grado, hasta ahora, las condiciones legales no permiten esta reclasificación. Actualmente, su presunto asesino, Damián Valdez Galloso enfrenta solamente cargos por asesinato en segundo grado, posesión ilegal de un arma de fuego y manipulación de pruebas.
¿Por qué, a pesar de lo despiadado del crimen, la Fiscalía no acusó de asesinato en primer grado al asesino de El Taiger?
Según las leyes de Florida, para acusar a Damián Valdez Galloso de asesinato en primer grado, la fiscalía necesita presentar evidencia irrefutable de premeditación en el crimen, algo que hasta el momento no ha podido lograrse. Este requisito es clave para elevar el cargo, ya que implica que el acusado planificó intencionalmente el homicidio.
Durante su primera audiencia, la jueza Mindy S. Glazer preguntó directamente a la fiscal estatal Katherine Fernández Rundle si existían pruebas suficientes para sustentar la premeditación y la respuesta de la Fiscalía fue negativa.
¿Qué podría cambiar?
Según la policía de Miami, no se han encontrado mensajes, llamadas o testimonios que demuestren que Valdez Galloso planificó el crimen, por lo que se presume que, de aparecer mensajes de textos tales como «si vienes a mi casa te voy a matar» o «dile a El Taiger que si viene le voy a meter un tiro», o cosas parecidas, vía llamada telefónica, redes sociales o comentarios hechos a una persona, entonces la Fiscalía podría proceder a agravar los cargos.
En el estado de Florida, la distinción entre asesinato en primer grado y asesinato en segundo grado se basa principalmente en la premeditación y las circunstancias que rodean el acto homicida.
Asesinato en primer grado:
Este delito se caracteriza por la premeditación y la intención deliberada de causar la muerte. Según el Estatuto de Florida 782.04, el asesinato en primer grado incluye:
- Premeditación: El acto fue planificado con antelación, demostrando una intención clara de matar.
- Homicidio grave: La muerte ocurre durante la comisión de ciertos delitos graves, como robo, secuestro o agresión sexual.
Las penas por asesinato en primer grado son severas, incluyendo cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional o la pena de muerte, describe Leppard Law.
Asesinato en segundo grado:
Este tipo de homicidio no requiere premeditación, pero implica una conducta extremadamente imprudente y un desprecio por la vida humana. Según el mismo estatuto, el asesinato en segundo grado se define por:
- Mente depravada: Acciones que demuestran un desprecio imprudente por la vida humana, sin intención específica de matar.
Las penas para el asesinato en segundo grado son también severas, pero generalmente menos que las del primer grado, e incluyen largas sentencias de prisión que pueden llegar hasta la cadena perpetua.
En resumen, la diferencia clave radica en la premeditación y la intención deliberada presentes en el asesinato en primer grado, mientras que el asesinato en segundo grado se caracteriza por una conducta imprudente sin planificación previa, que es hasta el momento lo que parece ajustarse al caso de Damián Valdez Galloso, el presunto asesino de El Taiger.
Aunque la fiscalía ha confirmado que este no fue un acto de defensa propia, la falta de pruebas que demuestren una planificación previa limita la posibilidad de elevar los cargos a asesinato en primer grado. De ser hallado culpable de asesinato en segundo grado, Valdez Galloso podría enfrentar entre 15 y 40 años de prisión, con la posibilidad de solicitar libertad supervisada.
La petición de los seguidores y los retos legales
Los seguidores de El Taiger, junto con su mánager Teresa Padró, mantienen la esperanza de que nuevas pruebas puedan surgir y permitir la reclasificación del cargo. Padró también señaló la posibilidad de que existan cómplices no identificados, lo que podría abrir una nueva línea de investigación. Sin embargo, las autoridades han sido contundentes al afirmar que Valdez Galloso actuó solo.
A pesar de estas declaraciones, las dudas persisten. Por ejemplo, testigos han indicado que Valdez Galloso podría haber recibido ayuda para trasladar el cuerpo, debido a la diferencia de peso y tamaño entre él y la víctima. Estas afirmaciones, sin embargo, carecen de pruebas concretas que puedan ser utilizadas en el caso.
Mientras tanto, Valdez Galloso permanece detenido sin derecho a fianza en el centro correccional Turner Guilford Knight de Miami. El caso avanza lentamente, con la fiscalía enfrentando la presión de miles de seguidores de El Taiger que claman justicia para el artista y sus cuatro hijos.
Mientras tanto, el debate legal continúa, dejando a los fanáticos del cantante en espera de respuestas claras sobre si habrá justicia plena o si el sistema judicial seguirá limitado por las pruebas disponibles.
Este viernes 22 de noviembre, Damián Valdez Galloso regresará al tribunal de Miami para continuar enfrentando los cargos relacionados con el asesinato de José Manuel Carvajal, conocido artísticamente como El Taiger.
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