Osmani Pardo Guerra, un trabajador por cuenta propia que se sumó a la protesta del Movimiento San Isidro en 2020, fue condenado a un año de prisión domiciliaria por el presunto delito de “resistencia a la autoridad”, en un juicio sumario celebrado este lunes en La Habana.
Según declaraciones del activista opositor, la citación a los tribunales le tomó por sorpresa y apenas el mismo día del juicio pudo conseguir un abogado para que lo defendiera, informó Radio Martí.
Pardo dijo que el letrado ni siquiera tenía tiempo de atenderlo pero logró convencerle de su inocencia y finalmente accedió a defenderle en el juicio.
“Al llegar al Tribunal, aquello estaba rodeado de agentes de la Seguridad del Estado, de policía uniformada, de gente vestida de civil en las esquinas, porque estaban juzgando también a muchos jóvenes del día 11 de julio, los que salieron a manifestarse pacíficamente”, dijo el joven, cuyo crimen aparentemente fue resistirse a dos policías que intentaron arrestarlo por escuchar la canción “Patria y Vida” a un elevado volumen dentro de su casa.
El joven disidente señaló que entre los agentes de la Seguridad del Estado apostados en las afueras de la sede del tribunal alcanzó a reconocer a algunos que le habían “reprimido en otras ocasiones, desde San Isidro hasta la fecha”.
Durante la vista un desconocido acusó a Pardo de mantener “actitudes antisociales”, mientras que dos testigos de la defensa, de los que sólo aceptaron a uno, opinaban lo contrario.
Citado por la fuente, el acusado afirmó que había llevado una carta de la presidenta de los Comités de Defensa de la Revolución, firmada además por varios vecinos, pero el tribunal se negó a aceptarla por no tener cuño oficial.
Osmani Pardo lamentó que al final pesaran más los testimonios de los dos policías, y que a pesar del buen trabajo de su abogado terminara hallado culpable y condenado a la reclusión domiciliaria.
Interpretada por los raperos disidentes Yotuel Romero, Maykel “Osorbo”, el Funky, el dúo Gente de Zona y el cantautor Descemer Bueno, “Patria y Vida” se convirtió en el himno de los manifestaciones antigubernamentales vividas en decenas de ciudades cubanas el 11 de julio pasado.
El tema se alzó con los premios a Mejor canción del año y Mejor canción urbana en la más reciente edición de los Latín Grammy, donde fue defendida por sus autores, excepto por Osorbo, que permanece encarcelado en la isla, al igual que el líder del Movimiento San Isidro, Luis Manuel Otero Alcántara, y el miembro del grupo opositor y periodista independiente, Esteban Rodríguez.





