¡Delante del Che Guevara y todo! Un negocio que usa como gancho en la puerta de entrada la famosa foto del Che Guevara —imagen tomada por el fotógrafo Alberto Korda durante el sepelio de las víctimas del sabotaje al vapor La Coubre— terminó siendo el escenario de una estafa que ha dado la vuelta al mundo.
Dos youtubers japoneses, conocidos por recorrer ciudades y mostrar su cultura y hospitalidad, vivieron en La Habana una experiencia que jamás imaginaron. Atraídos por una persona que los «sedujo» para que fueran a un supuesto “bar local”, con ambiente cubano y precios bien baratos, terminaron llorando, siendo empujados, humillados, para que pagaran una buena cantidad de dólares por dos mojitos, uno de los que apenas probaron.
“Este lugar fue una trampa desde el inicio. Nos llevaron allí solo para sacarnos hasta el último centavo. No éramos personas, éramos carteras con patas”, dijo uno de los jóvenes en el video que ya acumula miles de visualizaciones en YouTube, y que el influencer Niover Licea reprodujo en su cuenta de Instagram.
Lo más surrealista no fue el precio, sino la decoración. Dentro del local, lleno de frases revolucionarias, carteles del Che, y memorabilia de la Cuba heroica, se gestaba un acto de extorsión tan vulgar como violento.
“Nos empujaron, gritaron, nos revisaron las mochilas, y no nos dejaban salir. Solo querían saber cuánto dinero teníamos encima”, relataron ellos en el video.
Mientras Alina, una de las jóvenes, lloraba sin poder creer lo que ocurría, el camarero —con sonrisa inmutable— les decía que eso era lo que costaba el mojito. “Esto no es para locales, es para turistas”, sentenció uno de los implicados.
Y cuando lograron salir a la calle, llorando, una pareja cubana que presenció la escena les dijo simplemente: “Bienvenidos a mi país”.
En redes sociales, la indignación estalló. Algunos cubanos sintieron vergüenza, otros recordaron experiencias similares, y algunos justificaron lo ocurrido como “una forma más de sobrevivir”. Pero todos coincidieron en algo: si el Che pudiera mirar más allá de la pared, donde lo pusieron como adorno, tal vez volvería a salir del encuadre al ver en lo que se ha convertido «El Hombre Nuevo» que él aspiraba a «construir».
Ambos turistas revelaron en el video que este suceso, arruinó por completo la visión que ellos tenían sobre Cuba.





