En las próximas semanas, la terminal también experimentará una ampliación, lo que podría ayudar a reducir el tiempo de permanencia de los pasajeros en las zonas más afectadas por las deficiencias del aire acondicionado. A pesar de las mejoras, el reto de garantizar un clima adecuado en todas las áreas del aeropuerto sigue siendo una tarea pendiente
Esta crítica situación resalta no solo las dificultades técnicas de mantener operativo un sistema de aire acondicionado adecuado en las instalaciones del aeropuerto, sino también el más amplio problema de infraestructura y mantenimiento en servicios esenciales en Cuba. Mientras tanto, los pasajeros y trabajadores esperan ansiosamente una resolución que alivie las condiciones muchas veces insufribles de la Terminal 3, crucial para la imagen del país ante los ojos de visitantes internacionales y la comodidad de los ciudadanos cubanos que viajan al extranjero.