Lo que hace especial esta historia, es que es un episodio que no solo combina romance y sorpresa como todas las demás propuestas de matrimonio, sino que se transformó en un fenómeno viral sin guion. Ha sido una propuesta diseñada que se convirtió en un momento irrepetible y auténtico. Una escena accidental digna de un comercial de chocolate no oficial, lo cual genera especulaciones sobre su potencial publicitario, aunque no se ha confirmado uso comercial alguno.