Los resultados preliminares de exhaustivas pruebas toxicológicas realizadas al actor indican que no se detectaron rastros de fentanilo o la metanfetamina.
Alec Baldwin dijo que cuando agarró el arma le dijeron que era segura. Baldwin trata ahora mismo de limpiar su nombre demandando a las personas involucradas en el manejo y suministro del revólver calibre .45 cargado. Lo interesante es que los involucrados han dado versiones contradictorias de quién le entregó el arma a Baldwin.