En el Capitolio, un intento demócrata por autorizar el financiamiento total de SNAP naufragó el lunes en el Senado, lo que mantiene la incertidumbre para hogares que ya agotaron sus compras de inicio de mes. Mientras, el USDA informó al juez que liberará unos 4.6 mil millones de dólares de contingencia, insuficientes para restituir los beneficios completos.
En Miami, donde el “fustán” es comida en la mesa, la noticia cae como plomo: bodegas, mercados y despensas comunitarias se preparan para un noviembre más duro si el dinero plástico no llega a tiempo.
"Este es un gran país, no por el hecho de que me regalen algo, sino porque existen mecanismos para que tus hijos no pasen hambre y para que tú puedas salir adelante", expresó conmovida la mujer.
Te daban dinero cash, Food Stamp, Medicaid por 6 meses y todos los trámites que hacías. Incluso, si trabajabas, pero todavía conservabas los Food Stamp, aplicabas para el perdón de pago. Ya todo eso se acabó. El patrocinador sustituye en todo eso al gobierno.
Rebecca Goodwin no tiene reparos en contarlo. Tenía que depender de los cupones de alimentos para alimentar a sus dos hijas: una de 4 y otra de 11 años.