Jimmy Donaldson, más conocido como MrBeast, es un fenómeno de YouTube y, según cálculos recientes, un multimillonario. ¿Cómo es posible, entonces, que este joven de 27 años haya tenido que pedirle dinero prestado a su madre para pagar su boda? La respuesta es tan sorprendente como reveladora de una nueva forma de riqueza en la era digital.
Con más de 400 millones de suscriptores y un emporio de negocios que incluye desde barras de chocolate hasta un reality show en Amazon Prime con un premio de 10 millones de dólares, MrBeast no es precisamente un desconocido en el mundo de las finanzas. Según Celebrity Net Worth, tiene un valor de 1.000 millones de dólares neto. Esa es su fortuna.
Sin embargo, según él mismo reconoció públicamente, “personalmente tengo muy poco dinero porque reinvierto todo. Irónicamente estoy pidiéndole dinero a mi mamá para pagar mi boda, lol”, recoge People.
La declaración, que parece salida de un sketch, fue publicada por el propio MrBeast en su cuenta de X (antes Twitter) como respuesta a un post que lo alababa por haber amasado su fortuna sin herencias. Y aunque para muchos fue motivo de memes, otros vieron en esta revelación una lección brutal sobre cómo funciona el éxito hoy: no se trata de cuánto tienes en el banco, sino de cuánto inviertes en mantener la máquina andando.
MrBeast ha gastado, según él mismo, alrededor de 250 millones de dólares solo este año en la producción de contenido. Y eso no incluye su faceta filantrópica, que va desde regalar Lamborghinis hasta curar a 1.000 personas ciegas en un solo video. Pero su enfoque es claro: todo lo gana, lo reinvierte.
La boda en cuestión será con la autora sudafricana Thea Booysen, con quien se comprometió en Navidad de 2024. Aunque ambos han dicho que no quieren un evento extravagante, parece que ni siquiera algo íntimo sale barato cuando tu vida está marcada por desafíos absurdos como pasar 7 días a la deriva en el mar o construir una fábrica de chocolate real al estilo Willy Wonka.
Esta aparente paradoja —ser “rico en papel” pero depender de mamá para casarse— ha dado de qué hablar, pero también ha reforzado la marca que MrBeast ha construido: la de un millonario que no vive en jets privados ni mansiones, sino en estudios de grabación, diseñando retos delirantes para mantenernos pegados a la pantalla.
En un mundo en el que muchos influencers fingen lujos que no tienen, MrBeast hace lo contrario: convierte su falta de liquidez personal en parte de su narrativa. Porque al final, ¿qué es más viral que un multimillonario pidiendo un préstamo familiar?
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