Kevin Costner enfrenta uno de los capítulos más delicados de su carrera. El actor y director de Horizon: An American Saga fue demandado en Los Ángeles por la doble de acción Devyn LaBella, quien lo acusa de haber sido obligada a participar en una “violenta escena de violación no guionizada” durante el rodaje de la segunda entrega de la saga. Ahora, Costner contraataca: ha solicitado al tribunal que desestime la denuncia, asegurando que todo es “absolutamente falso” y que se trata de un intento de “sacarle dinero” con acusaciones sin fundamento.
LaBella sostiene que el 2 de mayo de 2023 fue llamada de urgencia para reemplazar a la actriz Ella Hunt, quien se negó a rodar una escena íntima improvisada.
Según su relato, lo que ocurrió fue una representación humillante, con contacto físico explícito no autorizado, sin la presencia de un coordinador de intimidad y sin las garantías mínimas de seguridad. En su demanda alega acoso sexual, negligencia y represalias, pues afirma que tras denunciar lo ocurrido fue marginada de posteriores oportunidades laborales vinculadas a la producción.
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Costner, de 70 años, niega rotundamente esa versión. En su declaración judicial asegura que jamás existió una escena de violación y que la secuencia en cuestión se limitó a un actor levantando parcialmente la falda de la doble en el interior de una carreta, sin desnudos ni contacto sexual. LaBella, agrega, estaba completamente vestida con un largo vestido, pantalones cortos y ropa interior que nunca fueron alterados. “Es profundamente decepcionante que alguien que trabajó con nosotros intente dañar mi reputación con falsedades”, expresó el protagonista de Danza con lobos, en declaraciones citadas por TMZ.
Los abogados de Costner, encabezados por Marty Singer, han aportado como prueba mensajes de texto en los que LaBella agradecía la experiencia de filmar Horizon y se mostraba entusiasmada tras concluir el rodaje. “No había resentimiento, solo gratitud”, subrayaron en documentos presentados ante el juez.
El caso se produce en un momento clave para la carrera del actor, que apostó buena parte de su prestigio y recursos en la ambiciosa saga western. La controversia amenaza con eclipsar el estreno de las siguientes entregas y recuerda que Hollywood sigue lidiando con los protocolos de rodaje en escenas íntimas, en particular tras el movimiento #MeToo.
Mientras la defensa insiste en que la demanda carece de mérito, el tribunal deberá decidir si las acusaciones avanzan a juicio o si, como pretende Costner, quedan desestimadas. Por ahora, la batalla judicial apenas comienza, y la reputación de una de las estrellas más reconocibles del cine estadounidense queda bajo una incómoda lupa pública.
