El gobierno argentino despidió al fotógrafo cubano Kaloian Santos Cabrera, autor de la imagen que permitió identificar al agente policial que dejó gravemente herido a un reportero durante la marcha de jubilados del pasado 12 de marzo en Buenos Aires.
Las fotografías de Kaloian, tomadas frente al Congreso argentino, recogieron no solo el momento exacto del disparo, sino también el nombre del agente en su uniforme.
Dicho de otra manera: las instantáneas tomadas por el cubano fueron determinantes para exponer públicamente la violencia estatal, ya que a partir de ellas la plataforma independiente Mapa de la Policía pudo reconstruir los hechos que terminaron con el fotógrafo Pablo Grillo hospitalizado por un impacto en la cabeza.
Kaloian fue despedido de la Secretaría de Cultura el 31 de marzo, pocos días después de la difusión masiva de las imágenes del gendarme.
La investigadora de la Universidad de Buenos Aires Cora Gamarnik acusó directamente al gobierno de “censurar al mensajero” como represalia por haber documentado un abuso.
En diálogo con la 750, Kaloian señaló que su despido “lo tomó por sorpresa” el lunes pasado, cuando culminaba su contrato laboral con la secretaría de Cultura.
“La directora de prensa de la Secretaría, que es mi jefa, me llamó para anunciarme que le había llegado mi nombre y que no iba a renovar mi contrato. Me tomó por sorpresa porque cuando se armaban las listas de despedidos se sabía días antes”, sostuvo.
“Mi nombre venía de más arriba y no era por mi desempeño profesional. Era tan personal que solo me despidieron a mí”, sentenció.
Según el gremio Asociación de Trabajadores del Estado, Kaloian fue el único trabajador desvinculado de la Secretaría de Cultura en esa fecha.
Al reclamar su reincorporación, las autoridades habrían respondido que la orden “venía desde arriba” y era “irrevocable”.
“Me encuentro ahora entre los más de 40.000 despedidos del sector público de la República Argentina”, añadió en un post que publicó en redes sociales para agradecer el apoyo que ha recibido tras ser despedido de una institución para la que trabajaba hace 13 años.
Nacido en Holguín, Santos Cabrera trabajó como fotógrafo y periodista en el periódico oficialista cubano Juventud Rebelde y en la revista digital La Jiribilla.
Además, ha sido colaborador de diversos medios gráficos y digitales, entre ellos Página/12, donde sus fotos han ilustrado reportajes de alto impacto sobre temas sociales y políticos.
Ha expuesto su obra en galerías y espacios culturales tanto en Buenos Aires como en La Habana, y forma parte de colectivos de fotografía en la región.
En los últimos años, su trabajo en Argentina ha estado más ligado al fotoperiodismo crítico en contextos democráticos, documentando movilizaciones sociales, abusos policiales y desigualdad.
